El primero de octubre se celebró el Día de la Persona Adulta Mayor y durante todo el mes festejamos y apoyamos las iniciativas de bienestar y salud que benefician a esta población, las cuales contribuyen a reducir el impacto de los comportamientos inadecuados que han tenido a través de los años y disminuir las limitantes asociadas al envejecimiento.
El Hogar Bello Horizonte, la Ucimed y el Colegio de Profesionales en Nutrición han unido esfuerzos para crear un protocolo de atención nutricional integral para la persona adulta mayor que contempla también la educación de los familiares y del personal de servicio de la institución.
El envejecimiento inicia aproximadamente a partir de los 30 años; los comportamientos alrededor de la salud y el bienestar que se adoptan desde edades tempranas influyen considerablemente en el éxito de nuestro envejecimiento, pero si tales comportamientos no son correctos corremos el riesgo de sufrir enfermedades crónicas como la diabetes mellitus, hipertensión, cáncer, entre otras. No podemos dejar de lado las condiciones propias de esta etapa como una percepción disminuida de sabores y aromas, un sistema gastrointestinal diferente, pérdida de apetito, pérdida de peso, entre otros.
Cuando vamos a casa de nuestras abuelas y abuelos es costumbre recibir mucho cariño, amor y felicidad, especialmente por medio de abrazos, sonrisas y buena compañía, sin embargo, no pueden faltar los manjares dulces, el buen café y las reposterías que tanto nos emocionan, pero ¿qué pasa cuando nuestros queridos adultos mayores necesitan de un cuido especializado en alguna institución?
Es usual demostrar el mismo cariño con los alimentos que se consideren emocionalmente satisfactorios, llevar alimentos a los centros de cuido es una situación común, pero esta práctica podría ocasionar un daño a nuestros abuelitos y abuelitas si la realizamos de forma inadecuada. Por esta razón contar con un protocolo que muestre claramente cómo identificar posibles ingresos de alimentos inadecuados y que permita crear conciencia en los familiares y el personal de la institución, no significa que no se deba brindar cariño y afecto con los alimentos, sino que se debe realizar de manera correcta, compartiendo los alimentos y preparaciones que favorezcan el estado de salud y bienestar de las personas adultas mayores.
¿Qué puede afectar nutricionalmente a la persona adulta mayor?
Una evaluación es muy útil, tener un diagnóstico preciso del adulto mayor y una valoración de su estado nutricional genera información clara para crear una intervención integral adecuada, necesaria para la elaboración del menú y de los objetivos educativos nutricionales para esta población, para sus familiares y para el personal de la institución. Con un protocolo se fortalecen los procesos para brindar una atención más empática, precisa y adecuada.
Los menús en las instituciones que atiendan a la persona adulta mayor, según el protocolo, se basan en la evaluación nutricional de la población. Modificar recetas para brindar una alimentación adecuada según sus patologías o condiciones de salud particulares, procurar un sabor agradable y lograr la satisfacción de las necesidades de manera oportuna, favorece a una mejora en la calidad de vida de estas personas.
La capacitación del personal de las instituciones que trabajen en la atención de esta población va en dos vías, la primera es la comprensión de la persona adulta mayor para abordar de mejor manera las diferentes patologías por medio de la alimentación, y la segunda es la determinación de los hábitos y comportamientos propios del personal alrededor de la salud. Una población laboral saludable y con bienestar está constituida por personal productivo, empático y altamente efectivo.
Las instituciones que brinden atención a la persona adulta mayor deben valorar los esfuerzos que se realicen para mejorar los procesos, la calidad de vida de los pacientes, la educación al personal de la entidad y el impacto a nivel familiar y comunitario. Estos factores son el comienzo para crear políticas de salud y bienestar, crear un abordaje robusto y un sistema de crecimiento continuo para la organización.
Extendemos una cordial invitación para que todas aquellas instituciones enfocadas en la persona adulta mayor, que quieran implementar cambios para la mejora de la calidad de vida y tengan interés en crear un enfoque integral para el abordaje de las necesidades nutricionales de esta población, se acerquen al Colegio de Profesionales en Nutrición y trabajemos de manera conjunta en beneficio de la salud de nuestros adultos mayores.
*Colegio de Profesionales en Nutrición