En el Ministerio Público confirmaron que ya se acusó al sacerdote Hugo Brenes Villalobos como sospechoso de los delitos de tráfico ilícito de migrantes y abandono de incapaz, en perjuicio de su sobrino de 6 años al que habría abandonado en un desierto en la zona fronteriza de Lukeville en Arizona, Estados Unidos, una de las áreas más peligrosas para los migrantes.
Según detallaron, la acusación la presentó la Fiscalía Adjunta contra la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Migrantes y como parte del proceso comunicaron a las partes el requerimiento conclusivo del despacho.
Debido a lo anterior, en el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) presentaron una querella, por lo que ahora se debe realizar una diligencia más antes de presentar el expediente al Juzgado Penal.
Hay que recordar que a Brenes lo capturaron los oficiales de la Policía Profesional de Migración (PPM) la mañana del miércoles 6 de noviembre de 2019, en dicha ocasión estaba frente a la Casa Cural en Sardinal de Carrillo, Guanacaste, pese a dicha detención, luego se le dejó en libertad.
“De momento, el sospechoso no se encuentra cumpliendo medidas cautelares, ya que la Fiscalía analizó el caso particular y valoró una serie de elementos, entre ellos, que el imputado cumple con los arraigos procesales. El caso corresponde al número de causa 18-00031-1321-PE”, detallaron en la Fiscalía.
ENCONTRARSE CON MAMÁ
Este caso se conoció meses antes de la detención del sacerdote, específicamente el 19 de junio de 2018, cuando los agentes de Migración de Estados Unidos encontraron al chiquito en medio del desierto, sentado en una piedra, con un bolso y un refresco gaseoso.
De acuerdo con las autoridades, ese día el menor de edad les dijo a los oficiales que Brenes le había dado instrucciones para que continuara el trayecto hasta suelo estadounidense con la esperanza de que alguna persona lo rescatara y así pudiera encontrarse con su mamá que vivía en el país norteamericano.
El día de la detención de Brenes, Stephen Madden, director de la PPM, explicó que luego de que se conociera el abandono del niño se iniciaron las pesquisas en conjunto con la Fiscalía Adjunta contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes para esclarecer lo ocurrido.
De esta manera determinaron que, semanas antes, Brenes intentó solicitar la visa para que su sobrino pudiera ingresar a Estados Unidos, sin embargo, se la rechazaron y optó por el traslado ilegal.
Para lograrlo, aparentemente el sospechoso empleó la vía aérea y viajó hasta Ciudad de México donde tomó un vuelo interno a Hermosillo, Sonora, y ahí caminaron varios kilómetros hasta dejar al pequeño a 287 kilómetros de la frontera con una nota que decía “Voy buscando a mi mamá” y donde tiempo después lo encontraron las autoridades estadounidenses.