Islamista de 42 años, busca el “traspaso del poder”
Damasco. (AFP) – El líder de los rebeldes sirios, el islamista Abu Mohamed al Jolani, nacido en 1982, se distancia de su pasado, en el que vinculado a organizaciones yihadistas como Al Qaida.
Además se deshizo de su turbante y recortó su larga barba para lucir un estilo más prolijo y ropa militar occidental tras liderar la caída del gobierno de Bashar al Asad, dinastía que estuvo al mando más de cinco décadas, fundada por Hafez al Asad, padre de Bashar.
Al Asad huyó de Siria ante el avance fulgurante de una coalición de rebeldes liderados por la organización islamista Hayat Tahrir al Sham (HTS).
Al Jolani, quien ahora usa su verdadero nombre, Ahmad al Shareh, se entrevistó con el ex primer ministro Mohamed al Jalali “para coordinar un traspaso del poder que garantice el suministro de los servicios” a la población.
Siria llevaba sumida en una guerra civil desde 2011, cuando el gobierno de Al Asad reprimió de forma feroz una ola de protestas pacíficas, lo que derivó en un conflicto que dejó 500.000 muertos y obligó a la mitad de la población a huir de sus hogares.
Al Jolani afirmó desde la Mezquita de los Omeyas, en la capital siria, que el triunfo de los rebeldes lo era “para toda la comunidad islámica”, pero HTS sigue siendo considerada un grupo “terrorista” por los gobiernos occidentales.
El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas se reunió este lunes con carácter de urgencia, a petición de Rusia.
Con la caída de Al Asad, Austria, Alemania, Bélgica, Suecia, Dinamarca, Noruega, Suiza y Reino Unido anunciaron que suspenderán las decisiones pendientes sobre solicitudes de asilo de ciudadanos sirios. Los precios internacionales del petróleo subieron este lunes, impulsados por la inestabilidad en Oriente Medio tras la caída del gobierno de Bashar al Asad.