La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) regionaliza las pruebas de COVID-19 con una extensión a cinco centros médicos que estarán en capacidad de procesar los análisis, esto tras el anuncio de Román Macaya, presidente ejecutivo de la Caja.
Los centros médicos San Carlos, Monseñor Sanabria en Puntarenas, Max Peralta, San Vicente de Paul y el Calderón Guardia serán los que ya están en capacidad de atender las demandas de pruebas que ya efectuaban el Hospital Nacional de Niños, el San Juan de Dios y el México.
Con este objetivo, esta semana la entidad procedió con la entrega de reactivos PCR-RT cerradas que sirven para procesar 600 muestras cuyo resultado se obtiene en el lapso de 45 minutos.
Por otra parte, al San Juan de Dios se le habilitó la posibilidad de realizar un total de 1.344 pruebas por día y cuenta con 5.000 reactivos.
Al momento, la CCSS compró un total de 140 mil pruebas PCR-RT que se suman a las 36 mil que el país obtuvo por donación.
“Esto es un seguimiento de la estrategia institucional que trazamos donde se comenzó con pruebas PCR abiertas, ya pasamos a PCR cerrada con el propósito de uso de máquinas más automatizadas y continuamos en el fortalecimiento de las capacidades institucionales de forma paulatina”, explicó la doctora Angie Cervantes.
En las próximas semanas se hará entrega de más equipos y pruebas.