De buena mañana y desde varias partes del país llegaron los comensales para degustar la paella más grande. La fila fue de 400 metros en las inmediaciones de las Ruinas, en Cartago. Se esperaba que 3 mil personas la probaran.
El anuncio de dicha proeza culinaria atrajo desde las 6 a.m. a muchos que quisieron estar entre los primeros para probar dicho manjar, cuya repartición arrancó a la 1 p.m.
Allan Acuña Guerra, uno de los organizadores de la paella más grande, dijo que entre las razones por las cuales se escogió a la muy noble y leal ciudad de Cartago es para celebrar su 450 aniversario.
Según comentó Acuña, se usaron 1.000 kilos de arroz, 500 kilos de mariscos, 250 kilos entre cerdo, pollo y chorizo, así como 100 kilos de legumbres.
Mientras se cocinaba, muchas personas se acercaron atraídas por el delicioso olor y otras para agarrar bolados o para aprender a preparar dicho platillo.