Roberto Chavaría Salazar, de 27 años, trabajaba en la demolición de una casa de cemento ubicada en barrio Fátima, en Heredia, sin embargo, un accidente laboral acabó con su vida, así lo informan las autoridades.
Una viga de concreto de unos cinco metros de longitud que estaba en una pared de la vivienda en la que el joven estaba laborando, cuando de pronto la misma se desprendió y lo impactó en la cabeza.
Los compañeros, entre esos el abuelo de la víctima, corrieron a auxiliarlo y le quitaron los 250 kilos que pesa la viga que lo fulminó.
BOQUEANDO
Testigos de la situación afirmaron a DIARIO EXTRA que el muchacho, luego del auxilio recibido, estaba boqueando, con la mirada perdida, con la cabeza deformada y también con un pozo de sangre alrededor.
De inmediato los otros testigos dieron aviso a las autoridades para que intentaran auxiliar a Chavarría.
Allan Corea, de la Cruz Roja de Heredia, dijo al Periódico del Pueblo que “el joven fue trasladado en condición crítica al Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia, con una lesión importante en el cráneo”.
Al instante del ingreso del muchacho al centro médico intentaron darle reanimación por unos minutos, no obstante, el joven no dio señales de mejora y murió en el lugar.
VENDEDOR
El Periódico de Más Venta en Costa Rica supo que el hoy fallecido era vecino de Santa Bárbara de Heredia, cerca del súper El Sol.
Además, al parecer, este muchacho también trabajaba como vendedor de productos textiles, prendas de vestir y artículos de cuero para la empresa Licy Shoes Sociedad Anónima.
CÁMARAS DE SEGURIDAD
La autoridad del Organismo de Investigación Judicial llegó al sitio para investigar el accidente y esclarecer la forma en la que este muchacho murió.
DIARIO EXTRA tuvo acceso a cámaras de seguridad que captaron los minutos antes del accidente del joven. En estos se observa a Chavarría sacando láminas hasta donde estaba un tractor demoliendo las paredes de la vivienda.
También se observa que el muchacho no estaba utilizando casco de seguridad. Este medio acudió al lugar para hablar con los trabajadores, sin embargo, al arribo nuestro ya no se encontraban.