Un total de 163 empresas autobuseras corren el riesgo de que no se les apruebe el alza en las tarifas porque están morosas con la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), pues adeudan más de ¢9,1 millones por concepto de canon de regulación.
Según la legislación, los concesionarios y permisionarios deben pagar trimestralmente ¢99.647 por cada bus que tienen operando. En total son 915 unidades las que no han cancelado el canon.
Transportes Unidos La Cuatrocientos es la que más adeuda, pues tiene 95 unidades morosas, seguida de Autotransportes San Antonio con 65, así como Transportes Unidos de Alajuela, Grecia y Naranjo Ltda., que tiene 51 buses pendientes de pago, y Transportes La Pampa con 36 unidades morosas.
María Angélica Carvajal, vocera de Aresep, indicó que la cantidad de empresas variaría al momento en que se haga la audiencia pública, pues los empresarios pueden llegar a un acuerdo de pago.
“Hasta el día de hoy (ayer) son 163 empresas las que están morosas en el pago del canon de regulación. Si no buscan un acercamiento de pago, corren el riesgo de quedar excluidas del ajuste nacional que está en estudio”, enfatizó Carvajal.
Aresep inició un proceso para el ajuste automático de las tarifas de bus a nivel nacional, que en promedio significa un alza del 1,19%, que irá desde ¢5 hasta más de ¢65 y entrará en vigencia en octubre.
Se trata del aumento que se activa dos veces al año para que los empresarios hagan frente al pago de salarios de choferes, chequeadores y mecánicos, así como la canasta de insumos de mantenimiento que integra aceites, lubricantes, llantas, neumáticos y reencauches, así como costos administrativos.