Dra. Ana Yendry Morales Blanco
Anivel clínico un porcentaje significativo de personas temen a las arañas, al mar, a subirse a un avión o a situaciones más extrañas como figuras geométricas, payasos o la propia muerte. A ese miedo, que en ocasiones se vuelve extremo, incontrolable y exacerbado, se le denomina fobia.
Las fobias tienen como causa una experiencia traumática infantil y como consecuencia el sujeto concentra toda su atención en un objeto o situación en específica, lo que provoca a lo largo del tiempo y desarrollo: un detonador de ansiedad o miedo cada vez que se encuentra con el hecho temido.
En el caso de una fobia bien acentuada, cuando el paciente está inmerso en ese sentimiento de miedo intenso, emocionalmente va a sentir temor a la muerte o cree que le va pasar algo malo en relación con su salud o su persona y lo sufre como un hecho total de aniquilación.
Independientemente de la fobia, volviendo a la experiencia traumática, la persona desconoce lo que padece, sabe que le teme a algo, pero no sabe por qué le invade el miedo profundo hacia esa situación.
Asimismo, como el sujeto no sabe lo que padece, se debe ahondar en un tratamiento psicoterapéutico las experiencias traumáticas, las cuales están reprimidas, con ello se logra que la persona pueda hablar de esos conflictos que la llevaron a padecer una fobia en su situación o vida actual; es decir, nuestras vivencias anteriores tienen una relación directa con nuestros síntomas actuales.
Entonces, cuando la persona enfrenta estas experiencias y se hace consciente de su padecimiento, en ese momento puede asociar libremente la situación conflictiva que ha vivido por largo tiempo con el temor a un objeto en específico, en este caso la fobia. El sujeto dirigido sobre esta vía de la asociación deja de hacer síntoma, dejando ir la fobia y se elimina ese sentimiento de miedo exasperado hacia el exterior.
Además del tratamiento psicoterapéutico también se puede optar por uno psiquiátrico, según el caso y evolución de la fobia. La ventaja de tratarla psicoterapéuticamente es que permite trabajar la misma desde la parte emocional y ahondando en la experiencia traumática desde la causa, mientras que la psiquiatría opta por la medicación, que en ciertas personas puede provocar alguna dependencia a largo plazo.
Lo más recomendable por los expertos es llevar una psicoterapia de la mano con una evaluación psiquiátrica para lograr una evaluación más completa.
Sin lugar a dudas la fobia debe tratarse, ya que limita la vida de las personas desde el punto de vista personal y social, disminuye la calidad de vida y los sentimientos exacerbados pueden provocar depresión, miedo intenso a la muerte, incluso desencadenar en el suicidio.
Si usted padece de un miedo intenso, no dude en recurrir a un especialista y la duración del tratamiento dependerá de la situación de cada persona.Es un trabajo personalizado y puede llamar para solicitar su cita al teléfono: 8872-0670 con la Dra. Ana Yendry Morales.
