Costa Rica enfrenta una crisis de seguridad sin precedentes. Este mes que pasó es el más mortal en la historia del país, con un registro 77 muertes por atentados con arma de fuego y arma blanca. Doce de estos atentados dejaron un total de 14 víctimas colaterales.
Las víctimas colaterales son aquellas personas que resultan heridas o mueren como resultado indirecto de un acto violento, como un acto de sicariato, y no tienen ninguna conexión directa con el objetivo específico del ataque, pero se encuentran en el lugar y momento equivocados, por lo que sufren las consecuencias.
El caso más reciente fue el de una mujer que murió el pasado fin de semana a causa de una bala perdida mientras estaba en una celebración en Hatillo, San José.
Entre las víctimas también se encuentra una menor de 15 años, en Aserrí, San José lo que genera alarma y preocupación.
La situación es aún más preocupante porque la mayoría de los incidentes violentos están relacionados con el narcotráfico y la delincuencia organizada. La policía asegura que ha intensificado sus esfuerzos para combatir estos grupos criminales.
MENTE DEL SICARIO
DIARIO EXTRA conversó con Huanelgue Gutiérrez, psicólogo criminal, quien explicó la mentalidad de los sicarios y cómo han cambiado sus patrones de comportamiento en los últimos tiempos. Según el especialista, antes, ver tantas víctimas colaterales no era algo común.
El psicólogo destacó la importancia de comprender que estos criminales están inmersos en una cultura de violencia y que su forma de pensar y actuar está distorsionada al momento de los homicidios. “Hay un perfil, para los sicarios, por ejemplo, la mayoría son personas jóvenes que andan entre los 18 y 25 o 27 años. Entre más joven es el sicario es más impulsivo y lo puede llevar a cometer actos más violentos porque son personas más arriesgadas, donde el análisis racional de las de sus actos queda un poquito limitado por esa esa parte impulsiva”, detalla Gutiérrez.
Añade además que algunos de los pistoleros, antes de asesinar a su objetivo, consumen estupefacientes para perder ese temor de matar.
“Hay una alteración a nivel cognitivo, a nivel de la capacidad de juicio y voluntad que los hace también volverse más violentos sin importar los daños colaterales que puedan ejercer”, acotó el psicólogo.
EVOLUCIÓN DEL SICARIATO
El experto manifiesta que el sicariato en Costa Rica comenzó a tomar forma en la década de 1990 como una forma de intimidación y control en los barrios marginales, principalmente en San José.
En un principio, el gatillero estaba vinculado a grupos locales que buscaban imponer su autoridad en zonas específicas.
Con el tiempo, el pistolero se convirtió en un fenómeno más amplio y sofisticado. El mejor ejemplo de esto es que en, los últimos homicidios el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) reporta al menos 4 casos donde detonaron armas AK 47.
“Hace unos años en nuestro país el tema del sicariato no era tan sonado como en la actualidad. Sí existía, pero eso se fue desarrollando cada vez más a través del tiempo por conductas aprendidas de modelos delictivos que han venido de otros países. También influyó el fácil acceso a las armas de fuego, eso es otro elemento importante que contribuye a que los delincuentes sean más violentos, de que ya no usen una pistola, sino que puedan utilizar una AK-47 o un Galil, que son de mayor poder y que, lógicamente, los daños colaterales van a ser mucho mayores”, finalizó el psicólogo.
ROL EN EL HOGAR
El especialista en conducta criminal también señala que existe una responsabilidad de los encargados de los muchachos que beneficia en la prevención del delito, especialmente cuando se trata de evitar que sus hijos sean reclutados como sicarios en las organizaciones criminales. Gutiérrez asegura que, si en el hogar hay maltrato, abusos, inclusive, abusos sexuales, físicos o consumo de droga, entre otros, son factores que desencadenan en problemáticas que los van a hacer caer en ese tipo de grupos.
“Eso va a repercutir por ejemplo en su desempeño en el sistema educativo y luego abandona la escuela o el colegio y fácilmente cae en temas de delincuencia. Es importante lo de las figuras paternas. La guía no necesariamente tiene que ser el papá, puede ser un tío si hay carencia de alguna de las figuras paternas, pero si tienen que haber límites en esos procesos sociales”, concluyó el especialista.
VÍCTIMAS COLATERALES
• 1º de enero: Un hombre en Sarapiquí.
• 4 de enero: Un hombre en Puntarenas.
• 4 de enero: 3 personas en San José.
• 4 de enero: Un hombre en Cartago.
• 10 de enero: Un hombre en San José.
• 11 de enero: Un hombre en Limón.
• 11 de enero: Una mujer en Limón.
• 13 de enero: Una mujer en Alajuela.
• 15 de enero: Una menor en San José.
• 18 de enero: Una mujer en Limón.
• 19 de enero: Una mujer en Alajuela.
• 28 de enero: Una mujer en San José.
• Huanelgue Gutiérrez
“El delincuente empieza con un tipo de delitos, tal vez no tan violentos, y su grado de sensibilización va disminuyendo, siendo de que ellos se atreven cada vez más a actuar de forma más violenta”.
PERIODISTA: Álvaro Zúñiga Gutiérrez
CRÉDITOS: Fotos Archivo
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Jueves 02 Febrero, 2023
HORA: 12:00 AM
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