Diario Extra - Dardo envenenado para acabar con el Monstruo

Con 32 años y originario de Buenos Aires, el argentino Dardo Federico Miloc se prepara para vivir su primer clásico este viernes a las 8:15 p.m. en San Juan de Tibás.
En entrevista con DIARIO EXTRA habla de La Cueva, su particular nombre y hasta de su futura hija tica.
¿Cómo nace lo de su nombre?
-Primero aclaro que es un nombre bastante inusual. En Argentina no hay muchos Dardo, pero mi abuelo paterno se llamaba Dardo. Es parte del karma familiar. No, no, en verdad orgulloso de llamarme así. Fue en honor al abuelo.
¿Alguna anécdota con ese nombre?
-La verdad es que en Argentina la gente muchísimas veces no creía que ese fuera mi nombre. Creían que era un apodo. Allá hay una novela muy conocida que se llama “Casado con hijos” y aparece el personaje Dardo Fuseneco. Eso le dio un poco de identidad a mi nombre.
¿Es usted familia de Carlos Miloc, el exjugador y extécnico uruguayo?
-No.
¿Cómo vive las horas previas al clásico?
-Bien, con mucho entusiasmo y mucha alegría. Con la expectativa de tener una gran noche, de pisar firme de visita.
¿Es más urgente la victoria ante Saprissa por la racha negativa que arrastra? ¿Eso los muerde, por llamarlo de alguna manera?
-Bueno, no me puedo hacer cargo de ese sentimiento porque, como dijiste bien, no he estado en esa experiencia. Entiendo que el fútbol se renueva y eso queda en la fidelidad de la gente y en el recuerdo. Eso siempre está el simpatizante, el hincha es el que siempre tiene la lealtad con el equipo. Los jugadores van rotando mucho, en ese cambio de realidades se presentan nuevos objetivos. Tenemos un equipo nuevo, la llegada de un técnico nuevo pero conocido, así que vamos con todo.
¿Si fuera entrenador a quién escoge: Lionel Messi o Diego Armando Maradona?
-Como jugador… pueden jugar los dos. Jaja… Yo intentaría poner a los dos.
¿Cómo se lleva con los goles, ya que es volante?
-Es un objetivo que me planteé en el fútbol costarricense. Es un desafío y quiero empezar a marcar más.
¿Costumbre o comida de Costa Rica a la que no se acostumbre?
-Todavía no me acostumbro al gallo pinto. Es que yo no desayuno de esa manera, me parece muy fuera de lo común. No me adapto, pero de a poco le damos chance.
¿Es cierto que volverá a ser papá?
-Sí. Mi señora Lucina tiene 7 meses. Está para finales de marzo o principios de abril. Esperamos a Carola. Ya tenemos a Álvaro, de 2 años y medio.
¿Por qué lo vemos gritando, hablando, acomodando al equipo?
-Porque yo siento que a la hora de jugar el técnico es el que decide quién participa y quién no, pero hay que ser útil estando dentro y fuera. Si veo lo que el compañero está haciendo y el perjuicio que está sufriendo el equipo, cómo no voy a compartir eso. Lo mío es crecer, es compartir, es intercambiar y me gustan los detalles. Soy observador, atento y comparto todo.
¿Qué le han dicho de jugar en La Cueva?
-Sabemos que es un partido de mucha expectativa, el partido más visto del año, sin duda alguna el clásico de Centroamérica. Queremos mostrar al equipo de una versión mejorada porque debemos mejorar día con día. Llegamos con mucha ilusión.
¿Está la Liga para silenciar la cueva?
-Sí, yo siento que sí. Estamos trabajando, para eso necesitamos trabajar y confiar en el trabajo. El trabajo es el refugio nuestro, no hay excusas.