Aunque no lo parezca, el síntoma de pasar por una sensación constante de sed, puede estar relacionado con otros problemas de salud que ameritan una revisión médica.
Se puede considerar la enfermedad de polidipsia, una anomalía caracterizada por una permanente e intensa sensación de sed, lo que a su vez se convierte en el factor que desata la ingesta descontrolada y desproporcionada de líquidos.
La sensación de sed se puede presentar de tres maneras específicas: pérdida excesiva de líquido en el organismo debido a la sudoración, como resultado de una enfermedad renal (un caso que está presente en más del 10% de la población) y la tercera posibilidad es una disfunción de la glándula endocrina.
A ciencia cierta, todo depende de los hábitos individuales de cada persona, ya que algunos beben 1 litro de agua al día, otras dos o incluso tres.
Para las causas físicas se recomienda clasificar e identificar la causa de la pérdida de agua, generalmente esto se hace con la ayuda de los especialistas en riñones.
Dichos expertos tienen la capacidad de analizar si el riñón es capaz de concentrar toda la orina y ver si los niveles de sodio se mantienen normales.
Por último, el tratamiento de la polidipsia depende de su origen y de su evolución, entre los que se pueden mencionar inyección de la hormona antidiurética, esto en caso de un tumor hipofisario, tratamiento médico para reporte de la diabetes, tratamiento nefrológico sí se detecta algún problema renal entre otros.
