Uno de los alimentos naturales más completos y saludables es el aguacate, aporta muchas vitaminas, minerales y grasas buenas, además de ser muy rico y versátil. Pero uno de los problemas con este fruto es su rápida oxidación y un aguacate negro, a no ser que lo quieras para una mascarilla para el cabello, no le gusta a nadie.
Una vez abierto el aguacate se acelerará el proceso de oxidación, así que para almacenarlo y que dure fresco por más tiempo se puede hacer uso del jugo de limón, un antioxidante ideal para desacelerar el proceso de ennegrecimiento del aguacate.
Esta técnica es comúnmente utilizada en el guacamole, solo se exprimen unas gotas sobre el aguacate y listo.
Otra recomendación es guardarlo con la semilla, así se evitará que gran parte de la superficie del aguacate se ponga negra más rápido.
Un método que utilizan los restaurantes es introducirlos en agua fría, pues esto limita su contacto con el oxígeno.
La cebolla, podría alterar el sabor del aguacate, pero es ideal para conservarlo. Solo se debe colocar en un recipiente con una cebolla troceada. Es mejor con la cebolla morada debido a que tiene mayor cantidad de flavonoides, un conservante natural
