Los centros penales siguen siendo noticia, no solo por las constantes riñas que se saldan con la muerte de privados de libertad, sino también por el hallazgo y decomiso de sustancias psicoactivas.
El Ministerio de Justicia y Paz confirmó la incautación de casi 2.000 gramos de marihuana, 686 gramos de cocaína y 199 dosis de crack en un mes. No solo droga, también decomisaron 219 pipas que los reclusos usan para fumar.
Algunos reclusos fabrican bebidas alcohólicas mediante la fermentación de granos, prueba de ello es que las autoridades decomisaron 253 tragos de chicha.
Como si fuera poco, los reos se las ingeniaron para meter al menos 9 routers, así como 107 con 91 chips móviles y 49 audífonos para tener una experiencia digital completa.
Los oficiales de la Policía Penitenciaria también incautaron buen billete al hallar $33 y ¢167.000 en efectivo.
LANZÓ “BOMBA”
El hecho más reciente se produjo este viernes, cuando un hombre aún sin identificar estaba en un charral junto al CAI Luis Paulino Mora en San Rafael, Alajuela, cargado con 7 teléfonos, 13 chips móviles y 1 cable USB.
Un policía penitenciario observó al sujeto en actitud sospechosa con un paquete en su poder, el cual lanzó al centro penal y posteriormente lo detuvo para ponerlo a las órdenes del Ministerio Público.
FALLECIDOS
En lo que va del año se reporta el deceso de 9 privados de libertad a causa de reyertas en las instalaciones de los centros penales.
El caso más reciente es el de una riña que se produjo el miércoles en horas de la noche. La víctima, de apellido Ruiz, fue trasladada al Hospital San Rafael de Alajuela, donde murió el día siguiente.
NARCOPALOMA
Para ingresar drogas, armas y teléfonos celulares a las cárceles los delincuentes se las ingenian con diferentes modalidades, desde enfermeros hasta parejas y una paloma.
Hace ocho años narcotraficantes adhirieron a una paloma una bolsa que contenía 14 gramos de marihuana y 14 de cocaína, ambas sustancias valoradas en ¢150.000.
Los ingeniosos pensaron que con el ave lograrían introducir esas drogas a La Reforma, pero no lo lograron porque agentes de la Policía Penitenciaria la vieron primero y tras quitarle el arnés la enviaron a un refugio de animales.
Este caso no es nuevo porque años atrás han utilizado gatos, perros e incluso iguanas para introducir narcóticos en los centros penales
PERIODISTA: Benjamín Blanco Manley
CRÉDITOS: Fotos: Archivo
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Sábado 13 Agosto, 2022
HORA: 12:00 AM
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