Paacume, un riego con riesgo
¿Para qué Paacume? Es la respuesta que aún no tiene clara el presidente Rodrigo Chaves. Quizás como economista ya la conozca, pero quiere que los técnicos se la digan. Trató de buscarla en la exgerenta Patricia Quirós, y rápido esta se acogió a la pensión, derecho al que tuvo que haber renunciado para mantenerse en el nuevo gabinete.
Paacume, Proyecto Abastecimiento de Agua para la Cuenca del Río Tempisque y Comunidades Costeras, es un apéndice del Distrito de Riego Arenal-Tempisque (DRAT), donde actualmente se produce caña de azúcar, arroz, piscicultura y pasto, principalmente. El nuevo designio llevará agua para consumo humano, agrícola e inversión turística por los próximos 50 años.
Quiérase o no, el Senara camufladamente está intervenido. Chaves fue claro en que, si no hacen cambios o ajustes, el Paacume no va en su Administración. Incluso anunció un recorrido por el futuro trazo para verificar ciertos detalles que lo tienen incómodo.
A hoy Senara está acéfalo al no contar con gerente y una Junta Directiva. No tiene quién firme la solicitud del primer desembolso, que debía solicitarse en estos días ante el BCIE, y creo que a Chaves eso ni fu ni fa, si el proyecto no presenta un modelo tarifario justo y equitativo entre sus futuros usuarios.
Paacume, con varias “Fes de Bautismo” en sus 40 años de existencia en el papel, es una ampliación del DRAT, cuyo presupuesto de esta última se sustenta de los ingresos por tarifas, que pagan sus abonados por el uso del agua.
Aunque tiene propia fuente de financiamiento del BCIE, desde hace años cuatro funcionarios contratados para trabajar en el DRAT dedican un medio tiempo en apoyo al Paacume. Desvisten un santo para vestir a otro, pues los salarios del Distrito se pagan con el aporte de los usuarios.
Otro asunto, el 82% de los ingresos del DRAT tienen su asiento en la caña de azúcar y el arroz. Ahora, con la nueva política de la Ruta del Arroz, con la libre importación y liberalización del precio al consumidor y productor, se espera una desbandada de pequeños y medianos clientes arroceros, que afectarán en un 38,8% la salud financiera del Distrito. En los ingresos la caña depara el 43,5%, piscicultura, 7%; y el restante 10%, entre pasto y otros cultivos.
Estas entradas por tarifas se utilizan en el DRAT, además de salarios, en administración y mantenimiento. Un impacto en la producción arrocera incidirá directamente sobre el Distrito.
Cómo se cubrirán los aportes del arroz, en los ingresos del DRAT, que con la llegada de Paacume se debilitará en su fuente de recursos, al quedar fuera de servicios posibles parcelas de Bagatzí, Tamarindo, San Ramón, Playitas y Falconiana. ¿Serán subsidiadas las familias cuyas tierras pasarán 12 meses sin producir o del todo nada para siempre? Se estiman 10 mil hectáreas afectadas de las cuales unas 3.400 pasarán a mejor vida. ¿Puede subsanarse esa situación? La respuesta la tienen los técnicos.
El Paacume sin arrancar ya presenta sus debilidades, en un riego con riesgo. ¿Será por ello que el presidente Chaves, al parecer tiene al intendente de Agua de Aresep trabajando en Zapote? Mejor no digo, como lo expresa algunas veces el mandatario en los miércoles de novedades.
