Diario Extra - 'Prepárense para sufrir'

Cómo olvidarlo, siempre con la celeste, poniéndonos contra la pared. Jugadorazo, el excapitán de la selección de Uruguay, Diego Lugano, está de visita en nuestro país, invitado por la Concacaf y lo aprovechamos para hablar con él de algo que conoce muy bien, los repechajes.
¿Qué se viene a su mente cuando escucha la palabra repechaje?
-Yo jugué tres repechajes. Uno fue contra Australia en el año 2005 que perdimos por penales, después contra Costa Rica que clasificamos y Jordania antes de Brasil. En mis 15 años de carrera he jugado dos finales de Libertadores, semifinal de la Copa del Mundo, semis de Champions League, finales en Brasil, Francia, Turquía, partidos grandes, pero nunca, nunca sufrí tanta tensión y presión como antes de un repechaje eliminatorio.
¿Cómo define vivir un repechaje?
-Es como una final donde está el purgatorio o el infierno. Hay todo para perder y solamente la obligación, para selecciones como Costa Rica o Uruguay, de estar en la Copa del Mundo. Es una carga de tensión enorme.
¿Cuánto complica jugar a un solo partido?
-Al ser un partido único obviamente aumenta mucho la incertidumbre y mucho más con el VAR. Yo todavía no entiendo el VAR en el fútbol ni como lo están haciendo funcionar. Es que cualquier jugada interpretativa con alguien que está afuera puede generar un penal o una tarjeta roja. Todo eso pone un manto de incertidumbre.
¿Qué ve de Nueva Zelanda?
-Tiene la experiencia del último repechaje ante Perú cuando, si bien es cierto, Perú fue superior, el partido fue competitivo. No será simple. Por un lado, creo que la experiencia del equipo de Costa Rica puede jugar a favor. Obviamente, también es un equipo con un promedio de edad alto. Eso de repente, jugando en el calor, en Catar, también puede generar algún tipo de incertidumbre. Es un partido de los más dramáticos que jugué.
¿Se puede hablar de que al final hay un desahogo?
-No es un festejo, es un alivio. No lo festejas, no podés. Yo no podía festejar repechajes. Me sentaba aliviado. Esa es mi experiencia. No creo que sea muy diferente después de un proceso eliminatorio sufrido. Tal vez en el caso de este proceso de Costa Rica, como el de Uruguay en aquel momento, el repechaje surge como una oportunidad y no como un castigo. Normalmente para Costa Rica o Uruguay jugar un repechaje es un castigo, porque nos obligan a ir directos. Eso es lo que nos exigen. Surge una oportunidad después de una eliminatoria complicada, pero sin duda de que es un partido dramático. Es un partido único, es en Catar, no es igual jugar a estadio lleno en El Centenario con 80 mil personas y un contexto mucho más dramático. Creo que pierde ese condimento, pero lo que vales es lo mismo.
¿Qué le podemos decir a la afición de lo que viene?
-Preparen el corazón para 90 minutos. Prepárense para sufrir.
¿Qué significa Costa Rica en su carrera?
-Fijate si la rivalidad con Costa Rica, en el buen sentido, será importante para mí que aquí en esta ciudad hice el gol más importante con mi selección. Y aquel partido en el Mundial (Brasil 2014) fue mi último partido con la selección uruguaya, después de 96 partidos consecutivos, 86 de ellos como capitán.
¿Qué recuerda de ese juego ante los ticos en el Mundial de Brasil?
-Ese día cuando perdimos contra Costa Rica se me confirmó una lesión en el cartílago de la pierna izquierda y fue mi último partido con la selección. Perdiendo 3 a 1 contra Costa Rica. Un partido que en el primer tiempo ganábamos 1 a 0 y en el segundo tiempo, un poco por errores nuestros, pero más por el fútbol de Costa Rica, que después hizo un mundial fantástico y solidificó lo que mostró en ese partido. Tengo ese recuerdo agridulce de mi último partido con la selección en Copa del Mundo y perdiendo fue contra Costa Rica. Tengo recuerdos muy marcados de Costa Rica.