Salgamos a votar responsablemente

Tinta con Sentido

Después de unos pocos meses de una campaña fría, ha llegado el momento de salir a votar, hemos visto multiplicarse las opciones electorales con partidos de todas las tendencias desde la derecha extrema a la izquierda y es difícil, por no decir imposible, para el elector identificar al candidato con el partido, la bandera, su tendencia ideológica o su propuesta.
La confusión es mayor cuando escuchamos debates y algunos de los participantes hacen gala de ignorancia, falta de experiencia o incapacidad. Las soluciones populistas se caen cuando se confrontan con la realidad y se analiza la viabilidad del planteamiento, las implicaciones legales, estructurales y sociales que impedirán su cumplimiento.
Ni qué decir cuando la prepotencia, la falta de sensibilidad o la empatía con las necesidades de los más pobres se dejan entrever en respuestas simplistas, vacías de contenido social que desconciertan a un público consciente de la pobreza en la que se debate un altísimo porcentaje de nuestra población y que sin duda pone en riesgo la paz social de la cual hemos disfrutado.
La incoherencia, los titubeos, las pifias, los errores en conceptos básicos y las ocurrencias de algunos hacen pensar que, lejos de estar presenciando una elección nacional, estamos asistiendo a un debate colegial donde no todos los jóvenes hicieron la tarea e improvisan por no quedarse callados. Lo que nos recuerda que los programas de gobierno no se escriben para llenar un requisito del TSE, estos deben ser el producto de meses de estudio, investigación y trabajo de quienes, junto al candidato, presentan sus planteamientos, sus propuestas y su compromiso con el país.
Por si no fuera suficiente denuncias y señalamientos acaban por desconcertar y desilusionar a un pueblo que lo único que quiere es elegir a un presidente con la capacidad, la experiencia y el conocimiento para dirigir los destinos de Costa Rica. Sin temor a equivocarme, el número de indecisos no tiene precedente y el porcentaje de abstencionistas crecerá a menos puedan encontrar respuestas que les permita recobrar la fe en nuestro sistema, confianza en los partidos y respeto por los candidatos.
Muchos indecisos se hacen la misma pregunta: ¿cómo escoger a la persona idónea que merezca mi confianza y mi voto, en medio del clima de recelo, negatividad y suspicacia en que vivimos?
Costa Rica necesita un líder con carácter sin ser prepotente, con sensibilidad para poder entender los problemas de quienes carecen de recursos sin ser populista, con conocimiento del funcionamiento del Estado y el compromiso para realizar una reingeniería y modernizar nuestras instituciones, con la claridad para responder a los retos que enfrenta el país y la humildad para entender que no tiene todas las respuestas.
Necesitamos una persona que cuente con un equipo experimentado, cohesionado y comprometido con una misma visión y rumbo para evitar la improvisación y las contradicciones que entorpecen la labor de cualquier gobierno. Es vital que el próximo mandatario cuente con un gabinete experimentado que pueda enfrentar con éxito la crisis económica, la crisis social y la crisis educativa que amenazan destruir a Costa Rica.
Los costarricenses, por otro lado, anhelan tener un presidente que los represente con dignidad ante el mundo y los organismos internacionales, que cree un ambiente de estabilidad y confianza para atraer las inversiones que generen crecimiento económico y creación de nuevas fuentes de trabajo.
Son muchas las cualidades y calidades que se esperan de un gobernante y podríamos seguir enumerándolas, pues un pueblo tiene el derecho de esperar lo mejor de quien aspira a la más alta magistratura, tiene derecho a exigir honestidad, capacidad y experiencia, pero también tiene la obligación de informarse, de escoger responsablemente y de salir votar.
Hemos tenido oportunidad de informarnos, de comparar y de valorar las capacidades de los aspirantes, hemos presenciado los debates, hemos escuchado sus propuestas, hemos podido conocer la trayectoria, los logros, el desempeño profesional, la filiación ideológica y la vida de quienes buscan nuestro apoyo.
Llegó el momento de ejercer el derecho al voto, de elegir a nuestros gobernantes y fortalecer nuestra democracia. Sin temor a equivocarme creo que este será el voto más importante que jamás hayamos ejercido pues en nuestras manos está el destino de nuestra patria, el fortalecimiento de la democracia y el futuro de nuestros hijos.
¡Salgamos a votar!

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

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Sábado 05 Febrero, 2022

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Gloria Bejarano Almada