El candidato del Partido Liberal Progresista (PLP+) Eli Feinzaig presentó su plan de gobierno, en donde propone la venta del Banco de Costa Rica (BCR), reducción de impuestos y el condicionamiento a distintas ayudas sociales.
En su propuesta, el aspirante a la presidencia de la República plantea que, “con el objetivo de promover una mayor eficiencia y competencia del sistema financiero nacional”, impulsará la venta del Banco de Costa Rica (BCR) y del Banco Internacional de Costa Rica (Bicsa).
“Ambas ventas deben realizarse a instituciones de primer nivel mundial que actualmente no tengan presencia en Costa Rica, de forma que dinamicen la competencia y la innovación mediante nuevos procesos y productos”, explicó.
“Es necesaria la venta para dinamizar el mercado bancario y lograr competencia, que reduzca las tasas de interés. Hay otras instituciones que se podrían vender o cerrar: Recope y Fanal. Más importante de eso, llevamos una propuesta de reforma del Estado para poder optimizar los recursos públicos, sin tanta burocracia y traba. Consideramos fusionar 23 instituciones del Estado, cinco instituciones que trabajan con el sector producción, tres ministerios económicos (…)”, agregó Feinzaig.
En el mismo plan presentado, se detalla que se eliminaría todo impuesto, subsidio o exoneración que no esté asociado a programas sociales, atracción de inversiones que generen empleos o a una erogación requerida para el buen funcionamiento de un Estado eficiente.
“No se eliminaría ningún programa social, de entrada, sino que haremos evaluaciones. Algunos sí serán cerrados porque lo que no sirve no debe seguir existiendo (…) Lo que la gente conoce como el aspecto solidario ha condenado a la gente a la pobreza. Las ayudas que se dan a cambio de nada o de votos, lo que hacen es condenar a la gente a la pobreza. Tenemos 27 años en que la pobreza no baja. La solidaridad se da cuando uno le da herramientas a la gente pobre para superar su condición, en vez de darles dádivas”, argumentó.
“Las ayudas van a permanecer condicionadas a que las personas se matriculen en cursos de capacitación, reconversión productiva. Es decir, que aprovechen los recursos que da el Estado para reincorporarse al mercado laboral. Que puedan velar por sí mismas. Los que no pueden, como personas con discapacidad, seguirán percibiendo las ayudas. No vamos a eliminar programas, sino cambiar la forma en como se administran. Es un condicionamiento a los programas sociales: Se les dará la ayuda a cambio de que se matriculen en cursos públicos o privados. Queremos devolverles la dignidad a las personas”, concluyó Feinzaig.
PERIODISTA: Aarón Chinchilla Carvajal
CRÉDITOS: Foto: Carlos Borbón
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Miércoles 10 Noviembre, 2021
HORA: 12:00 AM
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