El dicho popular dice que, en panza llena, corazón contento, sin embargo, también podemos decir que, si tenemos una vida plena, nuestro principal órgano también estará feliz.
En el marco del Día Mundial del Corazón le invitamos a realizar actividades de su interés que puedan contribuir a mantener una vida en equilibrio, que a su vez sumen a prevenir enfermedades o eventos que dañen el corazón.
Según datos estadísticos, las enfermedades cardiovasculares son la causa principal de muerte tanto en hombres como en mujeres a nivel mundial. ¿Pero a que nos referimos con enfermedades cardiovasculares?
Nos referimos a un grupo de desórdenes del corazón y de los vasos sanguíneos (red de arterias y venas por donde circula la sangre) entre los que se incluyen, por ejemplo, los vasos sanguíneos que llevan la sangre al cerebro (enfermedad cerebrovascular), otros vasos que irrigan el músculo del corazón (enfermedad coronaria) y otros subtipos más de enfermedades cardiovasculares.
Estos vasos sanguíneos funcionan como una tubería que lleva la sangre a los diferentes órganos del cuerpo, que pueden sufrir una obstrucción por depósitos de grasa (colesterol), que puede presentarse en personas con varios factores de riesgo a la vez, como, por ejemplo: diabéticos, personas con presión arterial alta y que a su vez fuman, toman alcohol en exceso, son sedentarios, comen muy mal con mucha grasa, exceso de calorías, son obesos, estas personas generarán un riesgo muy alto de sufrir un evento cardiovascular.
Los síntomas pueden ser variados, repentinos y pueden ser silenciosos mientras se desarrolla la enfermedad, entre ellos, dolor o molestia repentina en el pecho, palpitaciones cardíacas descoordinadas y dificultad para respirar; sudoración fría, mareos, fatiga, dolor o molestias en los brazos, hombro izquierdo, mandíbula o espalda, entumecimiento repentino en la cara, piernas o brazos, dificultad para caminar y mantener el equilibrio, además de dificultad para hablar, problemas visuales.
La mayoría de las enfermedades cardiovasculares pueden prevenirse actuando sobre factores de riesgo modificables tales como: eliminar el consumo de tabaco y alcohol, alimentación saludable, controlando el peso de las personas, realizar actividad física y ejercicio al menos una hora al día tres o cuatro veces por semana.
Conozca su cuerpo, vaya a control médico para realizarse exámenes de rutina, control de peso y presión arterial anualmente. Si padece alguna enfermedad como diabetes o presión alta, acuda a su chequeo médico regular cada tres a seis meses según indicación médica, así se le ayudará a controlar otros factores como el colesterol, los triglicéridos o grasas, el azúcar en sangre y otros valores de laboratorio más y si necesita medicación con fármacos no la abandone, siga su control y sus citas médicas regulares.
El estrés sepa cómo detectarlo, libérese haciendo actividades de su interés, saque tiempo para usted y sus seres queridos, acompáñese en una vida en equilibrio, plena y corazón contento.
*Colaboró la
Dra. Thais Mayorga Acosta Msc.
Médico Salubrista
