Diario Extra - Volver con un ex

Muchas personas en algún momento de su vida se cuestionan si deben retomar una relación con una expareja que se tuvo mucho tiempo atrás. La vida da muchas vueltas, dicen, y en una que va y en una que viene surge esa posibilidad de darse una segunda oportunidad, y es por eso que debemos tener claro ciertas recomendaciones.
1. Las reconciliaciones no tienen el éxito asegurado y en primera instancia lo que define en buena medida el éxito del reencuentro es la motivación de fondo.
2. Así, el deseo de volver que surge más por la soledad que por amor, tiene un pronóstico reservado, porque se regresa a la relación como resignado, más que motivado. En el plano popular se dice “peor es nada”, es decir, se vuelve porque se es incapaz de crear una nueva relación.
3. Otros vuelven por asuntos más banales, por ejemplo, porque con él o con ella se vivía un mejor nivel de vida, y al ver que yo como persona soy incapaz de procurarme ciertos lujos, recurro a ese vínculo en el cual se tenían a granel. Sobra decir que estas reconciliaciones no tienen ninguna posibilidad de éxito porque, ante todo, el vínculo es por un interés particular y no por motivos emocionales.
4. Tal vez suene extraño en nuestros días mencionar que algunos hombres vuelven por asuntos estrictamente logísticos. Son incapaces de vivir solos, porque les falta quién les lave, aplanche, cocine y acomode sus desórdenes, y ven en la reconciliación una forma de quitarse esas faenas de encima.
5. Otra condición que motiva la reconciliación son los hijos. En estos casos no se extraña a la pareja, no es que la quiero, sino que el deseo de volver es motivado por el cariño que se siente hacia los niños. Sea porque se desea evitar que crezcan sin un padre en la casa, o porque se teme que una nueva pareja de la ex conviva con ellos, con todos los riesgos que significa. A veces se teme que la madre no los eduque de determinada manera. Todas estas razones, aunque loables, difícilmente van a lograr que la relación de pareja funcione y sea gratificante.
6. En aquellas parejas en las que floreció la violencia en cualquiera de sus facetas, sea verbal, psicológica o física, es recomendable que antes del retorno busquen ayuda profesional orientada en evitar este tipo de situaciones.
7. Por eso debemos destacar que las parejas, después de una separación sea de larga o sea de corta duración, no deben volver hasta que aquello que los separó ya esté superado, de lo contrario, toparán de nuevo con la misma problemática y con el mismo riesgo, sino es que más, de volverse a separar.
8. Desde luego hay muchas reconciliaciones que son genuinas. Ambos son conscientes del amor que se tenían, de la calidad de la relación, de que el vínculo era realmente grato y que por una tozudez se echó a perder. En estos casos, y si el sentimiento es mutuo, resulta muy probable que la relación funcione y hasta se haga eterna.
9. Las reconciliaciones auténticas se viven con mucha expectativa, llenas de esperanza y alegría, porque se considera que “esta vez sí lo vamos a hacer bien”, por eso es importante que cuando afloren problemas se busque ayuda profesional cuanto antes.
10. A veces la sexualidad es “la piedra en el zapato” de muchas parejas, por eso antes de tropezar de nuevo es crucial consultar, teniendo en mente que hoy la mayoría de los problemas sexuales tienen solución.