Soy un hombre casado de 29 años. Tengo dos años de casado, pero ya no aguanto, mi esposa es muy celosa y lo peor es que me cela con mis hermanas. La verdad es que en mi casa todos somos muy apegados porque mi mamá murió cuando nosotros estábamos pequeños y mis dos hermanas son como madres para mí. Ahora ella no quiere que me manden mensajes, ni que las visite. A mí me parece que eso es colmo de los celos.
En términos generales se entienden los celos solo desde una perspectiva emocional o sexual, cuando en realidad los celos también se desencadenan ante diversas situaciones lejos de un contexto erótico o afectivo. Es común que la persona celosa sienta celos de amigos, compañeros, allegados, y hasta de familiares, porque le cuesta manejar la idea de que su pareja disponga tiempo para otras personas.
Recordemos que las demandas de los celos van en aumento, hoy es “no le hables a tu hermana”, mañana será “no te relaciones con tus compañeros de trabajo” y así sucesivamente hasta el punto de “ahogar a la pareja”. Es decir, los celos solo se calman momentáneamente cuando la pareja accede a limitar sus interacciones, pero es cuestión de tiempo para que nuevas exigencias surjan.
Muchos temen que este tipo de situaciones puedan llegar a complicarse a tal extremo que en algún momento se tenga que escoger entre la pareja y la familia, temor válido y fundamentado pero que se debe evitar buscando ayuda profesional.
Por eso la verdadera decisión que se debe tomar es acudir. Los celos no se combaten con una actitud complaciente, ni con esfuerzos aislados, sino que requiere de todo un abordaje profesional centrado en la persona celosa, pero que incluye además a la pareja.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Dr. Mauro Fernández
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Viernes 06 Agosto, 2021
HORA: 12:00 AM
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