Soy una madre soltera de 36 años. Tengo dos hijos, el mayor tiene 13 años y aún no ha desarrollado. Él en todo es muy chiquillo todavía, sus gustos y pasatiempos no son de “metido a grande”. Ahora con la PANDEMIA, escuchaba las conversaciones con los amigos y le hacen “bullying”. Las burlas y choteos que le hacen son crueles. El día que hablé con él se puso a llorar y me dijo que siempre lo tratan así.
El término bullying es un anglicismo que se ha vuelto muy popular y que denota el acoso físico o psicológico, usualmente prolongado a un estudiante, por parte de sus compañeros. Aunque el término es de reciente aceptación, el acoso escolar es uno de los males de la enseñanza en occidente, y en países como el nuestro siempre se describió como las burlas, choteos, desprecios y ofensas que algunos estudiantes reciben de sus compañeros.
Esta violencia suele ser la manifestación de una agresividad latente de ciertas élites del alumnado que aprovechan cualquier rasgo o característica para ofender a determinados alumnos y aun cuando todavía muchos sectores, le restan importancia y creen que son “cosas de jóvenes”, la ciencia tiene claro su efecto negativo en la psique del menor agredido.
Ante este tipo de situaciones es importante acudir de inmediato con las autoridades del centro educativo para sentar responsables y que se den las medidas correctivas. Desde luego, es muy importante la valoración psicológica del menor y la familia para superar los efectos nocivos de estas agresiones. Además, es recomendable una evaluación médica para determinar el estado hormonal del menor y así determinar si es necesario algún tratamiento.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Dr. Mauro Fernández
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Viernes 26 Marzo, 2021
HORA: 12:00 AM
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