La Comisión de Asuntos Hacendarios dictaminó este miércoles en la noche el primer presupuesto extraordinario por ¢40.500 millones para la compra de vacunas contra el Covid-19.
Los diputados después de tener en audiencia a los jerarcas del Ministerio de Salud y de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), además del viceministro de Hacienda, Isaac Castro Esquivel, y contar con el criterio de la Contraloría General de la República acordaron votar una moción de la liberacionista Ana Lucía Delgado que establece controles en el uso de los recursos.
Además haría que Hacienda deba devolver los remanentes si en el proceso el costo estimado de la compra es menor.
¿Por qué se podrían devolver recursos? Las autoridades de Salud estiman que cuando la vacuna comience a venderse en farmacias y hospitales privados habría un porcentaje de la población que ya no entraría en las proyecciones de la CCSS.
Pedro González, ministro a.i. de Salud, explicó que cuando hablan de comprar 640.000 vacunas adicionales sería un máximo y hoy todas las cifras son estimaciones.
Otro elemento que impactaría es que la vacuna no es obligatoria y habría otro porcentaje que no se la pondría, aunque hasta ahora no ha sido el caso. Eso sí, el jerarca fue enfático al afirmar que no piensan arriesgarse a perder dosis.
También Alex Solís, presidente de la Comisión Nacional de Emergencias, recordó que detrás existe un trabajo interinstitucional con profesionales especializados, quienes recomiendan por ejemplo las dosis que deben adquirirse.
NEGOCIACIÓN EXTERNA
El viceministro de Hacienda en su audiencia reconoció que en noviembre inició negociaciones con organismos internacionales como el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y el Banco Mundial (BM) para buscar una opción de crédito destinada a comprar las vacunas.
En un principio la propuesta del gobierno era obtener los recursos por medio de emisión de deuda interna con títulos valores y que ante la urgencia para contar con el proceso de vacunación y estar entre los primeros países se decidió por esta opción.
El criterio de la Contraloría, si bien no se opone al proyecto, remarca que ante la situación de crisis no se aumente el gasto más allá de los límites permitidos.
“La presente iniciativa estaría aumentando el nivel de endeudamiento interno y el déficit primario y financiero, hasta en un 0,1% del PIB. Por su parte, el crecimiento del gasto corriente al comparar con el presupuesto inicial del Gobierno de la República 2020 y tomando en consideración el primer proyecto de ley de presupuesto extraordinario 2021 se observa cercano a cero, distante del 4,13% máximo permitido”, señala el ente contralor.
“Tanto el Poder Ejecutivo como el Legislativo comprenden la relevancia de inmunizar, con la mayor celeridad posible, a la totalidad de nuestra población. Somos uno de los pocos países que han accedido con prontitud a la vacuna, lo cual tendrá un enorme impacto positivo tanto en la protección de la salud y la vida de las personas como en la reactivación económica posterior a la pandemia”, comentó Laura Guido, diputada del PAC.
El presupuesto serviría para adquirir 7.411.275 dosis con el objeto de vacunar a 3.705.638 personas.
El proyecto pasa al plenario para su aprobación final.
MOCIONES APROBADAS
Se ordena que la auditoría interna de la Comisión Nacional de Emergencias debe realizar informes bimensuales que evalúen la administración, uso y disposición de los recursos.
El presidente de la CNE tendrá la obligación de remitir los informes a la Contraloría con copia a la Comisión de Asuntos Hacendarios y la Comisión de Ingreso y Gasto Público.
En caso de existir algún remanente, una vez finalizado el procedimiento de compra de las vacunas, el Poder Ejecutivo deberá presentar un presupuesto extraordinario para rebajar dichos recursos de la emisión de títulos valores de deuda interna.
PERIODISTA: Bharley Quirós Navarro
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Jueves 14 Enero, 2021
HORA: 12:00 AM
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