El plan del Ministerio de Hacienda de aumentar el impuesto al valor agregado (IVA) con un sistema de devolución de plata a los ciudadanos más pobres podría prestarse para clientelismo político.
Así lo consideran reconocidos economistas como Eliécer Feinzaig y Juan Carlos Hidalgo, consultados este jueves por DIARIO EXTRA.
De acuerdo con Feinzaig, todo apunta a que el Partido Acción Ciudadana (PAC) busca comprar votos de la gente más humilde por medio de subsidios como este.
Similar criterio emitió Hidalgo, a quien además le genera dudas que el gobierno esté pensando en un sistema como este, a poco menos de dos años para las elecciones.
“La propuesta del gobierno tiene dos nombres, uno es populismo fiscal y el otro es clientelismo electoral. Lo que el gobierno está buscando es cómo crear un grupo del 40% de las familias que reciba un subsidio mensual para tenerlas agradecidas y pidiendo más para el día de las elecciones. Esto es una barbaridad que no se debe permitir”, sentenció Feinzaig.
Agregó: “Al PAC le sirve que haya unos ricos muy ricos que le financien las campañas y muchos pobres para darles este tipo de subsidios estatales para pedir luego los votos”.
Por su parte, Hidalgo dijo: “Estos sistemas de devolución no generan confianza en estos momentos porque la administración no tiene la madurez necesaria.
Ya vimos la experiencia con el bono Proteger, miles de personas que no debían recibirlo obtuvieron platas, por lo tanto no creo que el gobierno tenga esa capacidad.
Con los vacíos actuales se corre el riesgo de que el PAC use estos subsidios para clientelismo político. Esto no puede hacerse a la carrera, es algo que debe ser muy bien diseñado y el problema es que se está haciendo a la carrera”.
Cabe señalar que el miércoles Elián Villegas Valverde, ministro de Hacienda, dio a conocer dos propuestas para generar ingresos al gobierno.
La primera es pasar el IVA en la canasta básica del 1% al 7%. De implementarse, se le devolverían unos ¢11.000 mensuales a cada uno de los hogares más pobres ubicados en los cuatro últimos deciles (unos 640.000 hogares). La segunda propuesta es pasar el IVA de la canasta básica tributaria del 1% al 13%. Además se acabaría con las tasas diferenciadas del 4% en educación y salud, pues estos servicios privados también pagarían el 13%.
Bajo este esquema se devolverían unos ¢20.000 por hogar.
ECONOMISTAS OPINAN
Eli Feinzaig
“Aquí lo que se quiere hacer es calcular promedios de lo que habrían pagado de más por el aumento del IVA, entonces no es un mecanismo de devolución, sino un subsidio. Lo peor de todo es que quieren usar el mecanismo de los bonos Proteger y ese sistema se montó a la carrera, sin mucho tiempo para pensarlo y diseñarlo, y no se le ha hecho un análisis para saber a qué nivel estuvo. Además, todos conocemos personas que no han recibido la plata o también quienes la recibieron sin cumplir con los requisitos, entonces me parece que no es la mejor manera de proponer las cosas. A los pobres les darían este subsidio y la clase media, que es la que se esfuerza por enviar a sus hijos a educación privada porque la pública está fallando, la que se esfuerza por un médico privado porque en la Caja lo atienden a uno en 14 meses, esa es la gente que va a terminar pagando los platos rotos”.
Juan Carlos Hidalgo
“Ciertamente sí se debería aspirar a tener un verdadero sistema de devolución porque ciertamente exonerar el IVA a ciertos bienes y servicios o poner tasas diferenciadas no es lo óptimo, desde el punto de vista de la táctica tributaria, porque crea distorsiones en los precios, que terminan igual pasándose a los consumidores o que terminan siendo asumidas por las empresas con mayores costos de producción. Sin embargo, en estos momentos no genera confianza que estos sistemas tengan la madurez necesaria. Ya vimos la experiencia con el bono Proteger, donde miles de personas que no debían recibieron esa plata.
PERIODISTA: Marco Antonio González
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Viernes 20 Noviembre, 2020
HORA: 12:00 AM
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