Natasha Viviana Espinoza Mesén, de 35 años, murió atropellada por un autobús la noche del domingo en Hatillo.
La femenina era vecina de Hatillo 4 y madre de cinco hijos de 9, 11, 13, 15 y 18 años.
Ella perdió la vida en el cruce de Sagrada Familia, San José, tras ser arrollada por el bus de la línea de Concepción de Alajuelita, el cual le aplastó la cabeza.
La unidad de transporte público la impactó con el parabrisas y le pasó por encima provocándole la muerte de forma inmediata.
Cuando la unidad de Cruz Roja llegó no había nada que hacer, pues ya estaba sin vida.
Vecinos en la escena del homicidio indican que era una indigente muy conocida.
En el cruce de Sagrada Familia es normal ver gran cantidad de habituales y adictos que piden dinero en el semáforo.
El chofer del bus tenía todos los documentos en regla, le realizaron la prueba de alcohol con resultado negativo.
