A la crisis económica que tumbó al país en los años ochenta se le conoce como el “Carazazo”, pues para aquel entonces el presidente era Rodrigo Carazo Odio.
Una de las características de su gobierno es que la deuda externa prácticamente se quintuplicó y es por eso que algunos economistas creen que vamos por el mismo camino.
Esto por cuanto, el gobierno no ha dejado de pedir prestado. Primero para enfrentar la galopante desaceleración económica y ahora por la pandemia del Covid-19.
Sumada a la preocupación que el Ministerio de Hacienda haga un giro en las cifras y proyecte para el 2024 que la deuda pública sobrepasara el 74,5% del PIB (Producto Interno Bruto).
Se suponía que con la reforma fiscal recién aprobada para ese año más bien las finanzas públicas irían sanando, pero es todo lo contrario. Para que usted tenga una idea antes de la pandemia se hablaba de una deuda del 58,5% del PIB.
Estamos hablando entonces de un crecimiento de 16 puntos de la deuda en un plazo de cuatro años y eso es como meter a la economía en una olla de presión.
Para hablar de este tema, DIARIO EXTRA contactó al economista y viceministro de Egresos de Hacienda, Isaac Castro, quien confirmó que el panorama se vuelve complicado.
Sin embargo, rechazó que estuviéramos a las puertas de un “Carazazo”, como dicen algunos. Explicó que la deuda está subiendo a un 74,5% del PIB al 2024 porque el escenario cambió ante la llegada del Covid-19.
Antes de la pandemia se estaba pensando que llevaría una relación deuda/PIB de una manera en la que el mayor peso recaía sobre el financiamiento interno, ahora la estrategia se apoya en el externo. La razón es que es más barato.
Castro comentó que a consecuencia del virus se han visto en la obligación de acudir a organismos multilaterales. Los préstamos enviados al a Asamblea Legislativa ya superan los $3.500 millones.
“Lo que queremos es suavizar el efecto de la pandemia sobre el gasto adicional que hubo que hacer. El Covid-19 nos puso un incremento de la deuda este año. Antes habíamos visto que íbamos a llegar a una relación del 60% de manera más lenta, ahora llegamos más rápidamente”, señaló.
Agregó que un “Carazazo” sería como dejar que “nos lleve la inercia”, y que más bien hay un compromiso a pagar a todos los acreedores.
“¿Podría pasar lo de los ochenta? Yo diría que es muy difícil porque ahora tenemos instrumentos que nos da la Ley 9635 que nos permiten hacer un mejor manejo de la deuda. Podemos recurrir a recortes presupuestarios”, indicó.
Castro no proporcionó el dato de cuánto está la relación deuda externa versus interna, pero es probable que pronto se actualicen los números.
Para los costarricenses, una deuda concentrada en el mercado interno significa presionar las tasas de interés internas, es decir que si eso llegar a ocurrir las cuotas bancarias de todos empresas y personas tenderían al alza, de ahí la importancia de que ese crecimiento constante en el endeudamiento no nos lleve a un estrujamiento. No obstante, el gobierno no presenta aun un plan agresivo para la reducción del gasto.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
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Lunes 22 Junio, 2020
HORA: 12:00 AM
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