Diario Extra - Si le gusta la sal, ¡tenga cuidado!

En Costa Rica hay muchas personas amantes de la sal al punto de agregarle más cantidad a los alimentos que ya contienen, sin embargo, no se dan cuenta o hacen caso omiso a las afectaciones de la salud que esto puede generar.
Autoridades sanitarias en nuestro país han expresado su preocupación debido a que los ticos consumen el doble de sal que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda: 5 gramos al día por persona.
Maricruz Ramírez, especialista de la Coordinación Nacional de Nutrición de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) manifestó que el alto consumo de sal está directamente relacionado con la hipertensión arterial y que el incremento de la presión arterial es un factor de riesgo de los padecimientos cardiovasculares.
Un aspecto al que se debe tener cuidado y prestar mayor atención es a la sal oculta que no se detecta en alimentos dulces o que se agrega en durante la cocción y elaboración como, por ejemplo, de pan, cereales para el desayuno, repostería, queques, galletas y algunas salsas, o bien, cuando se come en un restaurante, donde no es posible determinar la cantidad de sal con que fue preparada.
Es necesario cuidarse también con el sodio presente en los condimentos que se utilizan para sazonar los alimentos y darles sabor, motivo por el cual se tiene que leer las etiquetas de los productos, asegura Ramírez.
Por su parte, Jaritza Vega Rodríguez, del Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa), cree que es necesario sensibilizar a la población en general y a la industria para que impulsen procesos de investigación, innovación, desarrollo y formulación de productos con menos contenido de sal y, al sector gastronómico, que también implemente estrategias.

RIESGO PARA LA SALUD

Sin duda, el alto consumo de sal entre los ticos es considerado como uno de los principales riesgos para la salud, por eso, una reducción del sodio en la dieta es una de las estrategias rentables para mejorar la salud de la población.
Según los datos que maneja Inciensa, los costarricenses consumen en promedio 11,3 gramos de sal al día.
Además de la hipertensión, la representante de Inciensa añadió la diabetes tipo 2, cáncer y obesidad dentro de las enfermedades que puede ocasionar el excesivo consumo de sal.

BUENOS HÁBITOS

En el Colegio de Profesionales en Nutrición (CPN) fueron directos al decir que los buenos hábitos de alimentación se adquieren desde los primeros años de vida, siendo la niñez el mejor momento para educar el paladar y acostumbrar al organismo a consumir poca sal.
“Los padres y los cuidadores cumplen un papel clave para educar y fomentar hábitos alimentarios adecuados en los niños”, señaló Norma Meza, presidenta del CPN.

RECOMENDACIONES

• Eliminar el salero de la mesa.
• Escurrir y enjuagar los alimentos enlatados con la finalidad de eliminarles el sodio que contienen.
• Consumir vegetales y otros productos frescos, en lugar de opciones enlatadas.
• Reducir paulatinamente el uso de la sal cuando se preparan los alimentos.
• Eliminar el uso de consomés o de preparaciones industrializadas y en su lugar usar hierbas naturales como tomillo, apio, culantro, orégano, albahaca, eneldo, entre otras.
• Revisar las etiquetas de los productos para verificar que el contenido de sodio sea bajo (menos de 140 mg por porción o por cada 100 gramos).
• Elegir de preferencia alimentos cuya etiqueta indique un bajo contenido de sodio.
• Preferir las frutas y vegetales frescos.

¿QUÉ PUEDEN HACER RESTAURANTES?

• Ofrecer un menú con opciones bajas en sal.
• Eliminar saleros y salsas en las mesas.
• Adicionar menos sal y en su lugar sazonar los alimentos con hierbas para dar aroma y sabor a sus platos de comida.