El Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) no echará a los niños de la Red de Cuido en caso de que el papá o la mamá beneficiada consiga un empleo.
La Procuraduría General de la República dio luz verde para que la población beneficiada cuente con los recursos, especialmente a las familias que en el proceso de atención superen la línea de pobreza.
Antes lo que regía era que cuando el padre o madre de familia ingresaba al mercado laboral sería excluido de este beneficio y debía costear el cuido de sus hijos.
De acuerdo con el ente procurador, “el IMAS no puede eliminar estos subsidios hasta tanto no exista garantía de que ellos han superado de manera plena y permanente esa condición”.
El IMAS realizó la consulta a la Procuraduría por medio del oficio IMAS-PE-025-2020 del 10 de enero de este año.
El criterio de la presidencia ejecutiva de la institución era que había una situación vulnerable de los derechos y que atentaba contra el interés superior de la niñez.
INCLUSIÓN LABORAL
Juan Luis Bermúdez, presidente ejecutivo del IMAS, dijo a DIARIO EXTRA que lo importante es reconocer que uno de los objetivos de la Ley No.9220 es garantizar la inclusión laboral de los padres y madres de familia.
“Básicamente la Procuraduría General de la República nos dice que en el ámbito de protección del derecho de los niños y de las niñas debe quedar bien demostrado que esa condición de pobreza o pobreza extrema ha sido superada de manera permanente.
Eso implica el hecho que una familia que tenía un ingreso de ¢180.000 y ahora tiene un ingreso de ¢250.000 solo para una jefa de hogar y su hijo no le vamos a revocar el beneficio”, declaró.
Agregó que se establecerá un parámetro objetivo para que esa revocatoria o suspensión se haga hasta el momento en que se garantice que esa condición inicial ha sido superada de forma permanente.
Dijo que ese parámetro objetivo implica no solo la línea de pobreza, sino que la familia tiene los ingresos suficientes para asumir de manera autónoma el cuido del niño.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), la línea de extrema pobreza en la zona rural es de ¢42.117, mientras que la línea de pobreza total fue de ¢86.353.
En el caso de la zona urbana el primer indicador es de ¢50.618 y el segundo de ¢112.317.
PERIODISTA: Greivin Granados
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Jueves 27 Febrero, 2020
HORA: 12:00 AM
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