CONSULTA: Tengo miedo en este nuevo año que inicia, miedo a que no sea feliz, a que no logre mis metas, a que no se cumplan mis deseos. ¿Algún consejo para mí? No quiero que este año me pase igual que el pasado, cuando mis temores fueron como un ancla que me impidió zarpar.
RESPUESTA: ¡Feliz año nuevo! ¡Que este año tengas muchas bendiciones! ¡Que este año se cumpla todo lo que deseas! Estas y aún más son las frases que usan aquellas personas que nos quieren para expresarnos sus mejores deseos. Ellas anhelan que nos vaya bien, ese sentir y actitud es hermoso y refleja un lindo detalle.
Para que en este año nuevo sucedan cosas hermosas, seamos felices, que se den muchas bendiciones o se cumplan nuestros deseos no depende de algo mágico que va a pasar porque alguien amablemente nos lo desea, más bien depende de uno mismo al practicar valores morales, al ser siempre maduro en la conducta, al dejar de hacer lo incorrecto para iniciar haciendo lo correcto constantemente, al ser disciplinado en mis acciones positivas para al fin ver fruto.
Vemos bendiciones cuando detenemos y controlamos lo mal que hay en nosotros, somos felices cuando cambiamos esas cosas que lastiman a los que nos rodean y a nosotros mismos, y también cuando nos ponemos en paz con Dios, la felicidad y las bendiciones las provocamos y las construimos nosotros, no suceden mágicamente. Mi historia y mi realidad se pueden mejorar este año a partir de cambios que se hacen desde el interior.
Marta Medici nos dice en este punto: “Este año nuevo te deseo que te animes a mirarte y que te ames como eres. Que tengas el suficiente amor propio para pelear muchas batallas. Que no te permitas los ‘no puedo’ y que reconozcas los ‘no quiero’. Que te expongas a lo que temes porque es la única manera de vencer el miedo. Que no te condenes por equivocarte, no eres todopoderoso. Que crezcas, no te deseo que este nuevo año te traiga felicidad. Te deseo que logres ser feliz, sea cual sea la realidad que te toque vivir. Que la felicidad sea el camino, no la meta”.
La felicidad y el ser bendecido es nuestra responsabilidad, no del otro; esto significa que este año nuevo no va a pasar nada hasta que no hagas tu parte. Por eso deseo que cambies y detengas de una vez aquello que tú sabes muy bien que debes cambiar, para que así no solo cambie el año sino también tú, y por ende cambie tu futuro y esté lleno de felicidad y bendiciones.
*Consejero familiar
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