Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) allanaron un apartamento donde al parecer viven dos hondureños sospechosos de participar en el crimen de José Manuel Kelly Rojas, alias Chitá.
Mientras los investigadores realizaron las pesquisas, oficiales de la Fuerza Pública custodiaron el residencial Colinas del Viento en Desamparados de Alajuela, donde ubicaron varias armas de fuego, entre ellas una calibre 47 y otra 9 milímetros, que serán analizadas por los expertos y se presume que fueron utilizadas por los sicarios contratados para matar a Kelly Rojas.
Chitá fue asesinado de múltiples disparos en El INVU Las Cañas en Alajuela, la madrugada de este domingo, mientras viajaba en un vehículo liviano y que al perecer portaba varios fajos de billetes.
Fuentes confidenciales aseguraron a DIARIO EXTRA que las diligencias judiciales tardaron más de cinco horas, donde recolectaron importante evidencia, entre esto un carro con placa de Honduras.
Los apartamentos que sirvieron de guarida por un mes a los catrachos son de alquiler y tienen un precio que ronda los ¢300 mil mensuales; en apariencia, otros inquilinos se quejaban con los administradores ya que al parecer los hondureños viajaban muy rápido por las calles del residencial.
FAMILIA DESAPARECIDA
A la víctima mortal se le investigó por la desaparición de una familia que fue sacada a la fuerza de su vivienda ubicada en Batán y desde entonces se desconoce el paradero de la pareja (la expolicía Andrea Angulo y su esposo Víctor Blanco) y dos niñas, una de 3 años y otra de un mes de nacida para ese entonces (1 de septiembre de 2014).
Las autoridades no descartan que las cuatro víctimas fueran lanzadas al mar.
El caso se mantiene bajo investigación para determinar quiénes están detrás de la muerte de Chitá, que había sobrevivido a un atentado.
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CRÉDITOS: Foto: Roger Soto
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Martes 05 Noviembre, 2019
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