El pueblo merece más respeto

Hace muchos años hubo una guerra civil, la Guerra Civil de Costa Rica de 1948, y fue una lucha librada entre distintos grupos de partidos políticos y ciudadanía. Es conocida también como Guerra del 48 o Revolución del 48. Esta se dio entre marzo y mayo de 1948, duró 44 días. Su causa inmediata fue la anulación de las elecciones presidenciales realizadas en febrero de ese año por parte del Congreso, las cuales, presuntamente, fueron ganadas por Otilio Ulate tras derrotar al Partido Republicano, liderado por Rafael Ángel Calderón, y que terminó con el establecimiento de la Junta Fundadora de la Segunda República, presidida por José Figueres Ferrer.
Ese triste acontecimiento pertenece al pasado y a nadie le gustaría que vuelva a repetirse. Desde hace unos meses o mejor dicho desde el año pasado las protestas en las calles se vienen incrementando, bueno, con razón o sin razón, no hay un día de la semana en que no se anuncia una manifestación sindical o una huelga en la administración pública, pero lo más interesante a todo esto es que estos veteranos líderes sindicales ahora incorporaron a sus filas los jóvenes dirigentes estudiantiles. ¿Qué ejemplo les pueden dar a estos colegiales? Ya lo hemos dicho: los estudiantes deben ser escuchados y a la vez no deben ser manipulados.
En nuestro país podemos protestar todos los días sin ninguna restricción y darnos el lujo de cerrar instituciones gubernamentales sin ningún problema porque vivimos en democracia. ¿Será igual en otros países? Vamos a ver qué está sucediendo en la excolonia inglesa Hong Kong. Fue una colonia británica hasta 1997, ahí conviven dos sistemas económicos diferentes, el comunista de Pekín y el capitalista de Hong Kong, gobernados por una misma política comunista. Esta gente siempre ha vivido a la democracia británica, sin embargo al Gobierno de China no le parece, a eso se deben las protestas masivas. Los manifestantes prodemocracia, en su mayoría jóvenes, reclaman más libertades políticas, Pekín viene amenazando con calmar las protestas al estilo Tiananmén de 1989.
Por otra parte, las protestas en Rusia no paran. Los manifestantes piden elecciones libres y justas en los comicios locales de septiembre. En los diarios internacionales se puede leer: “Protestas en Rusia: más de 1.000 detenidos en una manifestación en Moscú tras una de las represiones más violentas de las autoridades en los últimos años”. El principal líder de la oposición rusa, Alexéi Navalni, y la líder opositora Liubov Sobol por cualquier motivo la policía se los lleva detenidos.
Analizando estos dos casos podemos notar algo interesante: unos pidiendo que no les quiten la democracia y otros clamando por democracia. Estos sindicalistas, que todo lo saben, haciendo protestas, bloqueos, ahora huelgas con pausas y cuantas artimañas más, no le están haciendo ningún bien al país. No están ayudando al gobierno a salir de la difícil situación económica, hacer frente al desempleo, bajar la pobreza que está golpeando muchos hogares, entre otras, y creo que están haciendo que los inversionistas nacionales y extranjeros pierdan la poca confianza en el país.
Con respecto a los estudiantes: “el problema que le noto es que se apuntan mal con sindicalistas tipo Albino, que no sueltan la teta”, dijo una persona y, los padres de familia no deberían descuidar las amistades de sus hijos, más ahora. Hay gente que piensa que se trata de crear malestar en la ciudadanía para llevarnos al borde del caos, pero nadie desea que se repita lo del 48. Como ya lo hemos dicho: no estamos en contra de las protestas, pero el pueblo merece más respeto y también tiene sus derechos; mejor no jugar con la democracia.

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Lunes 30 Septiembre, 2019

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Lic. Roy Levell Brown