Un solo balazo en la cabeza provocó el fallecimiento de Óscar Esquivel Castillo, quien se encontraba en las cercanías de Repuestos Gigante, en el centro de Limón. Al hombre lo ultimaron cuando se bajó del carro que conducía.
Según trascendió, Esquivel laboraba hace unas semanas como chofer de bus en la provincia del Caribe, pero en los últimos días estaba trabajando como taxista informal en un vehículo color negro.
A través de un comunicado de prensa, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) señaló que, por medio de los primeros trabajos de campo que han realizado los agentes, los testigos describieron que observaron a tres sujetos que se le aproximaron, dos a pie y uno en bicicleta. Se cree que este último sacó el arma y la accionó liquidando al taxista informal cuando se bajaba del carro.
La otra hipótesis que se maneja extraoficialmente indica que el ahora fallecido fue víctima de asalto y al oponer resistencia los cacos, que se hicieron pasar por clientes, lo fusilaron para posteriormente salir huyendo.
Las cámaras de vigilancia de las inmediaciones de barrio San Juan, por Back Track, y las descripciones de los testigos se tornarán vitales para dar con los responsables de ejecutar al pirata.
