Pueda que te parezca algo difícil de conseguir, pero seguro que se puede alcanzar. Piensa que es la época más maravillosa del año y debes procurar que estos días sean muy agradables. Debes recordar que el estrés puede afectar nuestros pensamientos, sentimientos y conductas, además de provocar hipertensión arterial, enfermedades cardíacas, diabetes y obesidad, si no se controla. De hecho, muchos estudios han demostrado que se produce un aumento de la incidencia de ataques cardíacos y muertes relacionadas con el corazón durante la temporada festiva. Mucho de esto puede obedecer al estrés, consumo excesivo de alcohol, una dieta saturada en grasas o una combinación de los tres factores. Por ello es de suma importancia que le pongamos remedio al estrés de la época decembrina. Procura limitar el gasto, porque los problemas económicos son una de las principales causas de estrés durante esta época. Los datos al respecto confirman que el 62% de nosotros nos sentimos estresados a causa del dinero.
No te estreses por dinero
a- Establece un presupuesto. Es muy efectivo ya que ser organizado y realista acerca del presupuesto ayudará no gastar de más. En primer lugar, asegúrate de que tomas en cuenta todos tus gastos habituales como el alquiler o el pago de la luz. Planifica cualquier otro gasto durante las vacaciones, incluidas las fiestas que puedas realizar o las visitas a amigos o familiares y una vez que todos estos elementos han sido restados del presupuesto, puedes calcular qué cantidad que puedes gastar en regalos.
b- Una decisión a la vez. Ten presente que tratar de tomar demasiadas decisiones a la vez puede ser abrumador, y llevarte al agotamiento físico y económico, pues habrá un mayor riesgo de gasto excesivo.
c- Evita las tentaciones. Mejor limita el tiempo que pasas en tiendas y centros comerciales durante la temporada festiva, ya que eso puede ayudarte a controlar tus gastos. Además, controla los gastos impulsivos llevando solo el efectivo que puedes necesitar para las compras, dejando todas las tarjetas de crédito y débito en casa.
d- Gestiona las expectativas. Todo el mundo tiene una idea en su cabeza de unas vacaciones perfectas, pero cuando la realidad no alcanza la visión, el estrés puede alcanzarnos. Así que procura ser realista.
e- Problemas de dinero y estrés. Si la tensión te lleva al exceso del tabaquismo, al alcohol, los juegos de azar o comer en exceso, busca ayuda de un profesional.
Hay que tener en cuenta
lo que es importante
El gasto excesivo puede ensombrecer el verdadero sentimiento de la Navidad. Las relaciones con amigos y familiares son más importantes que los objetos materiales. Sentido común ante todo. A pesar de los grandes planes, ningún evento funciona a la perfección, y esto también es cierto para las celebraciones navideñas. En lugar de acumular estrés en el camino de cualquier percance que pueda ocurrir, vea estas calamidades en miniatura como una oportunidad para ejercer flexibilidad y resistencia. Cenar con 30 minutos de retraso, ensuciarse con comida el atuendo festivo o tener un árbol torcido no arruinará este día. En cambio, creará buenos recuerdos que podrás atesorar en los años venideros.
- Que los niños también sean realistas. Ayúdales a crear una lista de deseos, pero con el conocimiento de que no recibirán todo lo que se encuentra en la lista e informándole de lo que no sea aceptable o no se pueda obtener. Recuérdales que la Navidad trata de estar juntos y de planificar actividades divertidas que animen a todos a reunirse y divertirse mucho.
- Haz todo con relativa calma. Recuerda que llevar el mundo sobre tus hombros y tratar de lograr todo solo podría hacer mella en tu mente y tu cuerpo. Pide ayuda para llevar a cabo algunas de las tareas de esta época del año y tómate también un tiempo de descanso. No estar estresado te beneficiará a ti y al resto de tu familia.
- Evita comer en exceso. Porque, aunque muchos solo ganan medio kilogramo extra durante el período de vacaciones, esos gramos pueden acumularse en los próximos años y contribuir a la obesidad en etapas posteriores de la vida.
- Estrés y apetito: El estrés excesivo aumenta el apetito y también los antojos de alimentos azucarados y grasos. Disfruta de las delicias de temporada, pero trata de controlar el tamaño de las porciones. Además, un día de indulgencia no conducirá a un aumento de peso significativo, siempre y cuando planee retomar el rumbo con opciones de alimentos saludables y hacer ejercicio al día siguiente. Caminar es el antídoto para el estrés de las vacaciones podría ser tan simple como dar un paseo por el barrio cada día. Cuida tu estado de ánimo: El ejercicio produce endorfinas, sustancias químicas analgésicas naturales que se liberan en el cerebro, que mejoran la capacidad para dormir y reducir el estrés.
- Diviértete: Ya sea mientras adornas el árbol u horneas galletas festivas y olvida todo lo que queda por hacer en la lista de tareas, solo otórgate permiso para divertirte. La risa es una herramienta estupenda en la lucha contra el estrés: mejora el estado de ánimo, estimula el corazón, los pulmones y los músculos, y también libera endorfinas. La risa también aumenta la circulación, ayuda a los músculos a relajarse y disminuye los síntomas físicos asociados con el estrés. Sea en la forma que sea, asegúrate de incluir humor navideño, risas y carcajadas. Incluso esperar un evento divertido aumenta las hormonas que inducen la relajación y disminuyen las hormonas del estrés. La clave está en localizar las técnicas para combatirlo que funcionen mejor para cada uno y lograr unas navidades fantásticas e inolvidables.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Jueves 13 Diciembre, 2018
HORA: 12:00 AM
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