Abandonado por un contrabandista, sin agua ni comida, y en un entorno que quemaba a 38 grados centígrados, unos 100 grados Fahrenheit, así se encontraba un niño costarricense de 6 años en el desierto de Sonora, en Arizona, justo al norte de la frontera con México, al oeste de Lukeville.
Sobre el menor, a quien localizaron el martes por la noche agentes migratorios de Estados Unidos, se manejan dos versiones: la primera que un coyote lo abandonó en medio del desierto con apenas una bolsita que contenía sus datos personales.
La otra versión, según la Customs and Border Protection (CBP u Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza en español) , es que su tío le dijo que la patrulla fronteriza lo recogería y lo dejaron abandonado
El caso lo confirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores este miércoles.
Según medios internacionales, el pequeño les dijo a los agentes que iba a encontrarse con su madre.
Al momento de la intervención, el niño se mostró tranquilo y llevaba junto a él su certificado de nacimiento y un papel con varios números de teléfono que permitirían a las autoridades localizar a su progenitora quien está ilegal en Estados Unidos.
Tras conocer la situación, la vicepresidente y canciller de la República, Epsy Campbell, ordenó al cónsul general de Costa Rica en Los Ángeles, Mabel Segura, trasladarse al lugar para atender el caso y valorar la situación del menor.
Según se supo el niño no habló mucho y tampoco brindó mayores detalles, solo dijo que vivía en Costa Rica y que realizó el viaje con su tío para ver a su madre.
“Estamos atendiendo el caso de manera prioritaria y con abordaje integral. Afortunadamente él se encuentra en buen estado”, explicó Campbell
AYUDA INMEDIATA
Por el momento se encuentra en un lugar seguro y con los cuidados necesarios, luego lo trasladarán a un albergue y ahí se abrirá su expediente.
En la Casa Amarilla aclararon que el caso no tiene relación con la política estadounidense de separación de familias, que puso al presidente Donald Trump en el ojo de la crítica.
La Cancillería confirmó que la madre del menor reside en los Estados Unidos y se encuentra en una situación migratoria irregular, su identidad no ha sido revelada por razones de seguridad. Las autoridades ticas ya localizaron a la mujer.
En el abordaje del caso además participaron la cónsul honoraria en Arizona, Carmen Bermúdez, y el cónsul general de Costa Rica en Nueva York, Rolando Madrigal.
Sobre esta situación, el presidente Carlos Alvarado aseguró que harán todo lo posible para que el niño regrese a Costa Rica cuanto antes y en las mejores condiciones.
“Nos llena de angustia el corazón). Dichosamente nuestro Consulado en Los Ángeles ya tiene atendida la situación y la cónsul allá está en contacto con la Cancillería y con el PANI para dar la atención adecuada más integral y segura para el menor, y para tenerlo prontamente con su familia”, expresó.
Añadió que el caso llama a los costarricenses a reflexionar para trabajar por la cultura de los derechos humanos, la democracia y también a trabajar duro para mejorar la economía y generar fuentes de empleo para que menos personas se vean obligadas a abandonar el país.
Cabe señalar que, según la CBP, “el desierto de Arizona es un entorno despiadado para aquellos que no están preparados para su terreno remoto, duro y clima impredecible”.
DESIERTO DE SONORA
El desierto de Sonora, también llamado desierto de Gila por el río Gila, se localiza en América del Norte y su extensión es compartida entre dos países.
Políticamente se divide entre los Estados Unidos y México, cubriendo grandes partes de Arizona y California, así como los estados mexicanos de Baja California, Sinaloa y Sonora, el cual le da nombre.
Es uno de los desiertos más calurosos y grandes del mundo, pues cubre un área de 311-000 kilómetros cuadrados.
La distancia entre San José, Costa Rica, por carretera hasta el sitio es de más de 5.000 kilómetros.
Solo en mayo la patrulla fronteriza detuvo a más de 150 inmigrantes. Al año se hallan entre 200 y 300 cadáveres en ese sitio, pues las temperaturas son tan extremas que muchas de las personas que lo cruzan no resisten y mueren.
Encierra innumerables peligros, como serpientes cascabel, escorpiones y los cactus, que pueden causar lesiones de consideración.
Este desierto es “una enorme máquina de matar”, aseguran los expertos.
PERIODISTA: Marco Antonio González
EMAIL: [email protected]
Viernes 22 Junio, 2018
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA