La inundación en la nueva carretera entre Chilamate y Vuelta Kooper ha levantado roncha en las últimas 48 horas, además críticas por parte de especialistas, quienes aseguran que esto nunca debió suceder.
No es normal que una obra recién inaugurada presente un nivel de inundación porque genera dudas sobre los diseños y sistemas de drenaje.
De acuerdo con Olman Vargas, director ejecutivo del Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos (CFIA), el evento no debió suceder, todo lo acontecido es muy sospechoso y les preocupa bastante.
“Para el CFIA lo que sucedió nos genera una preocupación en el sentido de que eventualmente podría aparecer un problema en el diseño del sistema de drenaje con el que cuenta la carretera”, dijo.
“Es muy poco probable que al día siguiente de inaugurada la carretera se dé que cae la lluvia máxima que en el diseño se toma en consideración del sistema de drenaje”, continuó.
Los especialistas de dicho colegio analizarán lo sucedido para determinar qué pasó exactamente y si efectivamente algo no se tomó en cuenta o se omitió al momento de la construcción.
Además, les preocupa las próximas semanas, pues se acercan los meses más lluviosos del año, cuando se podrá apreciar si en realidad es un defecto o un hecho aislado.
“Con las precipitaciones de los próximos dos meses eventualmente nos daremos cuenta qué pasó, si fue una situación extrema o por el contrario si se da de manera recurrente es porque en puntos de la carretera hay problemas en el diseño hidrológico”, sostuvo.
INUNDACIÓN NO
DESAPARECIÓ EN 15 MINUTOS
Aunque desde el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y Casa Presidencial insistieron en que el exceso de agua desapareció en 15 minutos, el CFIA lo negó.
Vargas fue claro en que de acuerdo con la información que manejan desde su institución, tomó al menos 2 dos horas en drenar toda el agua que cayó durante la tarde.
“Uno no espera que eso pase en una carretera recién inaugurada (...) el sistema de drenaje sacó el agua que se había acumulado, pero no lo hizo en 15 minutos, duró mucho más tiempo de lo que dijo el ministerio, por la información que tenemos duró al menos un par de horas en evacuar todo”, finalizó.
Las labores en la ruta 257 tuvieron un monto original de $71,85 millones, sin embargo, por el desfase en las distancias se hizo un ajuste al contrato por un total de $5,4 millones, obra adicional que no puede considerarse un sobrecosto.
Este monto requiere autorización de la Contraloría General de la República (CGR) para ser utilizado y considerando el ajuste el valor final no supera los $78 millones permitidos por dicha institución.
En este momento se calcula que la construcción presenta un avance del 30%, por lo que se estima que los primeros dos carriles deberán entregarse en el segundo semestre de este 2017.
Actualmente se trabaja en la primera sección a nivel, donde se tiene todo el ancho de los carriles ya disponible y también en el lado izquierdo del viaducto en las estructuras metálicas que lo soportarán.
Se han colocado 275 de los aproximadamente 450 pilotes que se requieren para darle forma al viaducto, que permitirá que cientos de camiones ingresen y salgan de la TCM.
La segunda parte de la obra deberá estar lista para febrero del próximo año, a pesar de los retrasos reportados en el megapuerto, pues el MOPT tiene como meta finalizar en la fecha originalmente acordada.
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CRÉDITOS: Foto: María Luz Rojas
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Sábado 26 Agosto, 2017
HORA: 12:00 AM
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