Después de que un grupo de pescadores artesanales de Manzanillo alertó de dos lagartos muertos que flotaban en el Golfo de Nicoya, justo donde aparecieron entre 20 y 30 toneladas sardinas muertas, el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) y el Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca) confirmaron el hecho, pero les fue imposible hallarlos. Así lo explicó a DIARIO EXTRA el director de Senasa, Bernardo Jaén, y el de Incopesca, Gustavo Meneses.
“El problema es que ese lagarto tiene más de 12 horas muerto y al encontrarse flotando en el mar, un equipo salió con los guardacostas a buscarlo, pero no fue posible, por lo que no podremos realizar análisis”, explicó Jaén.
Meneses insistió que ellos solo tuvieron conocimiento de un lagarto, aunque los pescadores afirman que eran dos. “Los pescadores tomaron la foto cuando ya el lagarto había salido del estero. Si le hubieran amarrado una pata y entregado al equipo que viene trabajando el tema hubiera sido más fácil, pero al llegar nosotros ya no estaba”, declaró.
PREOCUPACIÓN
Debido a este hallazgo, los pescadores artesanales manifiestan su preocupados y piden explicaciones a las autoridades.
DIARIO EXTRA conversó con Deyver Morales, uno de los líderes comunales de Manzanillo, quien encontró los dos reptiles muertos.
“Se les dio las coordenadas exactas, no creo que en una playa tan pequeña no lo hayan podido encontrar. Nosotros en la comunidad lo que sentimos es que se quiere ocultar información y tememos que sea un envenenamiento”, denunció.
EVENTO AISLADO
Sin embargo los biólogos del Incopesca minimizan el tema y afirman que es poco probable que la muerte de los lagartos se deba a la misma causa que las sardinas.
“Si había una o dos especies más muertas, como en este caso, son eventos aislados que no se pueden relacionar al de las sardinas. Cosa muy distinta si aparece una muerte masiva de otra especie”, explicó Gineth Valerín, bióloga del Incopesca.
Aun así, los pescadores exigen que se les expliquen a profundidad los resultados, pues aseguran que no solo los lagartos aparecieron muertos sino también otros peces como bagres.
Wilmar Matarrita, otro dirigente comunal de las zonas costeras de Puntarenas y Guanacaste, informó que los pescadores se organizan para exigir que se entreguen los análisis en un plazo corto.
Ante estas preocupaciones Meneses reconoció que la reunión con los pescadores es oportuna.
El Incopesca recordó que no hay restricciones de pesca en la zona, ni peligros para el consumo. Además que la marea se ha “tragado” el 95% de la masa de sardinas muertas, por lo que los problemas de mal olor no existen, así como una posible contaminación ambiental. No será hasta el próximo miércoles cuando se conozcan los resultados de laboratorio sobre el agua y la carne recolectada.
PERIODISTA: Bharley Quirós Navarro
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Sábado 18 Febrero, 2017
HORA: 12:00 AM
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