Entre enero y julio, la Policía de Tránsito decomiso 3.794 motocicletas por estar alteradas,
por no contar con los documentos al día, por no portar sus placas o porque sus conductores
se encontraban bajo los efectos del alcohol o no poseen licencia, entre otras razones.
Esta cifra implica que por cada motociclista fallecido en los primeros 7 meses del año (114), la Policía de Tránsito ha sacado de circulación 33 motocicletas.
“Ya lo hemos dicho antes, hay un serio problema de salud pública, los muertos en motocicleta casi que triplican a los que han muerto en un automóvil; la mayoría fallece por conductas inapropiadas y porque es imposible vigilar a cada motociclista. Sin embargo, estas cifras en cuanto a motocicletas decomisadas reflejan claramente que no estamos cruzados de brazos y atacamos el problema preventivamente y con sanciones”, dijo Mario Calderón, director de Tránsito.
Además de los 3.794 vehículos de dos ruedas que han sido decomisados, se han retenido 7.743 pares de placas a conductores.
Asimismo, continuó Calderón, se sancionó a 82 motociclistas por llevar niños de menos de 5 años de edad en su vehículo.
Adicionalmente, a 1.920 personas que manejaban moto se les sancionó por no llevar puesto o no llevar bien sujeto el casco, al tiempo que otros 1.109 también recibieron una multa por permitir que su acompañante no lo hiciera.
Finalmente, 1.729 conductores de motocicleta recibieron una sanción por no portar ropa o
chaleco reflectante de la luz mientras conducía su vehículo.
