La Policía de Control Fiscal (PCF), del Ministerio de Hacienda, se pellizcó de gran manera al punto de tener tres operativos seguidos en un mismo día, donde lograron allanar una empresa por evasión tributaria, decomisar una licorera y detener un camión, matrículas 27198, con alrededor de 10 millones de cigarrillos ilegales.
Según el jefe de dicha dependencia, Irving Malespín, todo se da por medio de una llamada anónima que los alerta sobre el vehículo pesado que había salido este martes desde la Zona Sur con una gran cantidad de cigarros.
Tras el seguimiento los agentes fiscales lograron la detención del vehículo en El Coyol de Alajuela, cerca del peaje sobre la ruta 27, San José-Caldera, donde el conductor de apellidos Sandoval Quiel era acompañado por un menor de edad.
Los hombres traían los paquetes de cigarros marca Cumbia ocultos en bolsas de basura e iban escondidos detrás de varias cajas que llevaban cartones de huevos y no portaban ningún tipo de documentación que validara la legalidad de los productos.
CONDUCTOR REINCIDENTE
En apariencia los hombres serían parte de una organización que se dedica al tráfico ilegal de mercadería procedente de Panamá, de hecho Sandoval fue detenido hace un mes en San Sebastián mientras se encontraba en Autos Cruz, pues al parecer desde ahí operaba presuntamente de forma ilícita.
Se cree que la mercadería incautada tiene un valor aproximado de $2 millones, es decir ¢1.000 millones.
La evasión de impuestos está tipificada en el artículo 211 de la Ley de Aduanas, pues se maneja como contrabando ilegal de mercaderías y la evasión de los correspondientes impuestos, lo cual podría alcanzar penas de hasta 5 años.
Las autoridades realizan un intenso operativo para frenar el tráfico ilegal de esa mercadería, debido a que aproximadamente hace 22 días intervinieron un contenedor en Paso Canoas.
Adicional a ello, el jueves de la semana anterior, las autoridades de la Dirección de Aduanas del Ministerio de Hacienda intervinieron un almacén fiscal en Heredia, donde encontraron un contenedor en que había 2 millones de cigarros; en esa ocasión eran de marca Gold City y en apariencia el contenedor provenía de Panamá.
Según la Dirección de Recaudación de Impuestos del Ministerio de Hacienda, el tabaco paga ¢21,88 de arancel por cada cigarro, además esos productos están gravados con un 13% del impuesto sobre las ventas, 95% por selectivo de consumo, 2,5% a nivel de importación.
Por lo que al no declarar esos impuestos, estarían percibiendo una mayor ganancia y a la vez defraudando al fisco.
