Una nube gigantesca, prácticamente del tamaño de nuestro país, produjo fuertes vientos y lluvias en Limón, causando caída de árboles sobre vías y viviendas.
“Todo fue por una nube realmente grande, casi del tamaño del país”, informó a DIARIO EXTRA Daniel Poleo, del Instituto Meteorológico Nacional (IMN).
Una nube de estas dimensiones causa ráfagas de viento que pueden ser de más de 100 kilómetros por hora y lluvias en un radio de uno 2-3 kilómetros; asimismo caída de árboles y hasta de tendido eléctrico y postes.
Pero la situación ventosa y lluviosa no se mantuvo por mucho tiempo y unas horas después la situación se normalizó y se pudo proceder a limpiar las vías, recoger los “escombros” que causaron los estragos a lo largo de la costa del Caribe costarricense.
Cerca de la noche, ya todo estaba en condiciones normales, sin precipitaciones, ni siquiera reportes de vientos ni lluvias, informó el meteorólogo.
PARA HOY TRANQUILIDAD
Poleo agregó que para hoy no se espera una situación similar a la vivida ayer, más bien todo lo contrario, pues el pronóstico es de lluvias y vientos serán menos.
“Por supuesto, ante esta situación prevemos unas condiciones mucho más estables en el Caribe”, añadió.
La vía 36 que comunica Limón con Sixaola estuvo bloqueada por varias horas, y se necesitó la intervención del Cuerpo de Bomberos y funcionarios del ICE para quitar los troncos y ramas que cayeron sobre la vía.
Los cuerpos de auxilio también debieron intervenir en varias viviendas que se vieron afectadas por la caída de árboles sobre ellas.
Ante la situación, la población limonense pasó un mal rato, sobre todo por el peligro de que las viviendas perdieran sus techos, pero al final si bien fue un fuerte susto, todos pudieron salir tranquilamente una vez pasó el fenómeno meteorológico.