Ha esperado tanto tiempo que creyó no tener fuerza para iniciar de nuevo, pero Juven Miranda Arredondo, padre de Elvia Miranda Hurtado, al enterarse del caso de femicidio que dio a conocer DIARIO EXTRA, provocado por Manuel Córdoba, donde la víctima mortal fue Melina Calvo Arce, el desesperado papá se armó de valor, y con gran esfuerzo revivió lo que ya daba por perdido desde hace doce años.
El hombre relató como su hija era esforzada y trabajadora, que no entendía por qué de repente dejó de saber de ella. Debido a la condición de desaparecida que tiene Elvia, el asesino en cuestión sigue legalmente casado con ella.
EXTRAÑA DESAPARICIÓN
Don Juven, quien es conocido como "Macho", dijo: "Desde que mi hija empezó a andar con Manuel siempre pasaba preocupada, él era my celoso, controlador y posesivo, pero ella lo quería. Ellos vivían en una casa que ella consiguió mediante un bono de vivienda hace muchos años, en el sector de Tres Ríos, ahí estuvieron tres años, después se fueron para Heredia, allá todo se complicó. Un día mi hija me dijo que tenían planes de ir a bailar, que por eso iban a mandar a mis nietos a la casa de la abuela paterna, al día siguiente en la tarde intenté comunicarme con Elvia, pero me dijo Manuel que ella había desaparecido, que no sabía donde estaba, y que se había ido con otro hombre, dejándole los chiquitos. Yo fui a la casa de mi hija a ver qué podía recuperar de ella, o a que me dieran más explicaciones, pero la casa estaba vacía, saqueada, él me dijo que quemó la ropa de ella, había lavado paredes y pisos del lugar, no quedaba ni rastro de las cosas de mi hija".
El señor en su intento de dar con el paradero de su hija, fue a poner la denuncia sobre la desaparición de la mujer, bajo el expediente número 00-003527-059-PE, el caso quedó en investigación. Pocos meses después se da cuenta que todo fue archivado. El le pidió ayuda a un familiar de Manuel, quien trabaja en el Poder Judicial, y conocía de la denuncia, pero no lo quiso ayudar a velar por el seguimiento de la situación.
PRIMER NIDITO DE AMOR
La casa en Tres Ríos se convirtió en el primer hogar de Manuel y Elvia, pero también en lo que parece ser el inicio de una pesadilla que no se sabe el final, o si ha tenido final. Una vivienda, ubicada dentro de una alameda, era cuidada con esmero por la señora de la casa, según la información de vecinos y el mismo papá, todos concordaron en lo ordenada que era Elvia cuando se trataba de cuidar el aseo y la apariencia de ese lugar. Ubicado frente a la casa, Juven preguntó por las dispocisiones que había ahí, explicando que llevaba mas de diez años sin ir al lugar, y que estar en la propiedad era una forma de sentir más cerca a su hija, solo quería saber quienes habitaban la vivienda. Una familia reside desde hace once años en la que ahora es una estructura descuidada y con mucho trabajo por hacer, pagan un aproximado de ¢150.000 por mes, Desde hace tres años no ven al que se hacía llamar dueño del lugar, siempre le han pagado por medio de depósito, a una cuenta en el Banco de Costa Rica.
LOS VECINOS RECUERDAN
Apenas vieron llegar a "Macho", vecinos de muchas casas salieron a saludarlo, y le preguntaban por Elvia, todos la recordaban con cariño, pero pendientes de la situación que según ellos pasó la mujer durante años.
El relato fue desgarrador, don Juven estaba impactado, no podía creer lo que le comentaban, pero se preguntó por qué cuando el puso la denuncia de su hija desaparecida nadie investigó lo suficiente como para llegar a escuchar las barbaridades de las que él se estaba dando cuenta.
"Su hija visitaba mi casa y la de varias vecinas, siempre pedía auxilio, o indirectamente uno le notaba dolencias diferentes a menudo. Moretes, mordiscos, infecciones en sus partes íntimas, y una actitud de temor eran muy normales en ella". "Un par de veces se escucharon gritos horribles, ella decía muchas veces que no y no. En una de esas al día siguiente, contó entre un grupo de amigas que había sido violada por su esposo, que ella se sentía como un objeto sexual, ella sabía que él era "ojo alegre", y por eso no se extrañaba de las enfermedades, y las molestias que le aparecían en el cuerpo". "Aquí varios señores lo encontraban en los bares, sabían que maltrataba a la esposa, algunos lo encaraban, le preguntaban que por qué lo hacía, la explicación que daba era que si tenía marcas, iban a saber que tenía hombre, que por eso no le iba a poder dar vuelta". Esos fueron parte de los testimonios que dieron varios vecinos de la alameda donde está la casa de Elvia.
DIARIO EXTRA visitó la casa de familiares de Manuel, pero no quisieron dar declaraciones, solo comentaron puerta adentro que el imputado ya había sido trasladado al Centro Penitenciario "La Reforma", donde descuenta cuatro meses de prisión preventiva.
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CRÉDITOS: Fotos: Herbert Arley
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Miércoles 13 Mayo, 2015
HORA: 12:00 AM
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