Hospedarse en uno de los dos lodges reconocidos por la revista National Geographic entre los 24 mejores del mundo cuesta más de ¢500 mil durante la temporada alta. Estos se ubican en medio de reservas naturales privadas y ofrecen a sus visitantes un lujo natural que satisface a los más exigentes.
Pacuare Lodge y Lapa Ríos son dos de los 24 selectos establecimientos que cumplen con las características que buscan los turistas más sofisticados, interesados en la naturaleza y conservación para disfrutar de la biodiversidad sin ingredientes artificiales.
María Fernanda Workman, agente de reservas de Lapa Ríos, explica que la tarifa de $1.071 incluye 9 tours a través de la propiedad, alojamiento, alimentación, avistamiento de aves, caminatas por bosques primarios, paseos por plantaciones de medicina natural y una caminata con guías de primer nivel hasta Puerto Jiménez a través del río de la reserva.
Pacuare Lodge, una reserva que empezó con 16 hectáreas y ahora cuenta con 300, apuesta por mantenerse pequeño en medio del bosque tropical seco.
“Somos resultado de un emprendimiento que lleva tiempo gestándose, no salió de la noche a la mañana, nos hemos comprometido a crear un lugar bonito en un sitio que tiene una belleza impactante.
Nos esforzamos por crear condiciones de primer orden para los huéspedes, empezó con un colaborador, hoy somos 70 que tenemos como prioridad una atención personalizada”, detalló Roberto Fernández, director general de Pacuare Lodge.
La Península de Osa alberga a Lapa Ríos, una reserva de bosque primario que tiene un corredor hacia Corcovado, descrito por la revista como uno de los lugares más biológicamente intensos en el mundo por su flora y fauna, un diamante de la biodiversidad.
Para ambos hoteles la publicidad que les genere el reconocimiento de National Geographic no solo los impulsa, más que eso, representa la difusión de Costa Rica.
