La tica Floribeth Mora, sin lugar a dudas, tiene una agenda muy apretada luego de participar en la ceremonia de canonización, en la cual Juan Pablo II y Juan XXIII fueron declarados santos. Ayer a primera hora se trasladó al Santuario del padre Pío, en San Giovanni Rotondo, Italia; la mujer afirma que le tiene mucha fe y no solo ella sino los costarricenses en general.
Prueba de ello es que la compatriota llevaba una misión muy importante desde que salió del país y era ir a dejar unas cartas con peticiones que hicieron ticos, que creen fielmente en la intercesión del padre Pío.
Y como si esto no fuera poco, la agenda no queda ahí, pues las autoridades de la Embajada de Costa Rica en el Vaticano hacen todas las gestiones posibles para que tenga una audiencia con el papa Francisco, el cual doña Floribeth no duda que también se convierta en santo.
Además a media semana tanto ella como su familia van a partir hacia Polonia, ciudad natal de Karol Wojtyla (Juan Pablo II) y estarán ahí aproximadamente un mes.
En la peregrinación hacia el padre Pío contó con la compañía de sus allegados, del arzobispo metropolitano José Rafael Quirós, el arzobispo emérito Hugo Barrantes y el obispo de Cartago José Francisco Ulloa. También asistieron el embajador Fernando Sánchez y su esposa Milagro Linares.
PERIODISTA: Sandra Cordero G
CRÉDITOS: Fotos: Cortesía de Radio Fides
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Martes 29 Abril, 2014
HORA: 12:00 AM