Despilfarro en el olvido
Editorial
Tal y como lo había adelantado DIARIO EXTRA, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) oficializó el traslado de las oficinas del Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (Senara) a su sede central en Sabana Sur.
De este modo, continúa su plan de centralizar todas las áreas en un mismo lugar. Anteriormente, ya había sumado las oficinas del Instituto de Pesca y Acuicultura (Incopesca).
El MAG justifica el traslado en el hecho de que habría un ahorro estimado en ¢368 millones por año, pero más importante que eso es saber finalmente si hubo responsables por el despilfarro en la apertura de una soda de lujo.
Al césar lo que es del césar y eso no es responsabilidad de esta Administración.
Sin embargo, sí queda un sentimiento amargo de que este caso terminó en nada.
Estamos hablando de que no fue ¢1, sino ¢1.062 millones lo que se destinó a hacer una soda donde hoy se instala el Senara. ¿Cómo es posible que se haga borrón y cuenta nueva y aquí no pasó nada?
La respuesta debería darla el Ministerio Público, porque hay un informe de la Asamblea Legislativa que determinó que el tema pudo ir más allá de un mero error administrativo.
Ya pasó casi un año desde que los diputados determinaron que una funcionaria de alto rango pudo faltar al deber probidad en el manejo de fondos públicos. A la fecha, no se sabe si el caso terminó como muchos, archivado.
Y lo peor es que después vemos repitiendo a estas mismas personas en otros cargos públicos y salta entonces la pregunta que de seguro nos hacemos todos: ¿cómo es posible?
Estamos hablando de plata de todos. El dinero que se da en custodia a los funcionarios públicos es para un uso responsable; no se vale que agarren los recursos como si salieran de su propio bolsillo.
Hubo diputados que recomendaron la aplicación de sanciones, pero al final no pasó nada. Se enojan los padres de la patria cuando se dice que algunas comisiones se convierten en un circo y es que falta empoderar estas investigaciones para que la Fiscalía tome parte en el asunto como es requerido.
Entre otras cosas nos dijeron que esa soda era un privilegio para unos cuantos y nadie se explicaba cómo en tiempos de supuesta crisis fiscal pudieron cometer tal despilfarro.
El equipamiento listo para un hotel de 5 estrellas terminó en el Ministerio de Justicia, una donación que hizo el nuevo ministro Víctor Carvajal para no desperdiciarlo.
En el caso de los diputados, estamos hablando del expediente 20.855.
Ellos fueron los que determinaron que aquí debió haber algo más que una responsabilidad política.
Otro tema es que el costo original era de ¢235 millones y el monto subió en un 300% más allá de lo presupuestado.
Esta soda dejó de usarse en 2020, todavía peor. Se pasó casi tres años sin darle ningún uso.
El MAG en su momento dijo tener estudios internos que señalaban cómo no resultaba rentable abrir nuevamente, entonces ¿cómo se justificó la inversión?
Lo grave en este tipo de situaciones es la impunidad. No podemos permitir que esto vuelva a ocurrir y esperamos que la Fiscalía también rinda cuentas, porque, repetimos, es la plata de todos.
“Estamos hablando de que no fue ¢1, sino ¢1.062 millones lo que se destinó a hacer una soda donde hoy se instala el Senara. ¿Cómo es posible que se haga borrón y cuenta nueva y aquí no pasó nada?”.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Jueves 21 Septiembre, 2023
HORA: 12:00 AM