La Universidad Nacional (UNA) realizó una encuesta entre los ciudadanos costarricenses referente a la “Percepción sobre la trata de personas y tráfico ilícito de migrantes”. La implementación estuvo a cargo de los investigadores del Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo) y uno de los datos que destacan es que 4 de cada 5 consultados tienen conocimiento sobre el tema.
Un total de 12 preguntas relacionadas a este flagelo permitieron conocer la realidad costarricense: los delitos no son ajenos al país, ni en conocimiento ni mucho menos en víctimas.
Para las personas que participaron en el estudio, el tráfico y venta de drogas, la delincuencia organizada y la inseguridad son los principales problemas que aquejan a la colectividad, seguidos de la violencia, la pobreza y el desempleo. Todos factores que se vinculan con la trata de personas y el tráfico ilegal de migrantes.
Norman Solórzano, director de Idespo-UNA, destacó que “la información fue recolectada con estándares de rigor, contrastada y es de mucha utilidad para la comunidad nacional que necesita informarse y prepararse”.
Por su parte, Cynthia Mora Izaguirre, encargada de la investigación, señaló que “el tema de la trata de personas no nos es ajeno, no es un tema que afecta solo a otras sociedades, es algo que ya ha tocado nuestras puertas y lo tenemos dentro. Necesitamos prepararnos para reconocer este fenómeno. Con este estudio queremos contribuir a ese proceso de concientización”.
FACTORES
Los expertos coinciden en que el tema del tráfico de personas gira sobre el mismo eje de otras problemáticas “como el narcotráfico y la venta de armas, que no se confunden, pero hay una cercanía y en muchos casos hay una convivencia y son expresiones de ciertos ámbitos”, recalcó Mora.
El primer factor analizado fue el conocimiento sobre la trata de personas. Se obtuvo como resultado que los ticos se refieren a esta situación como comercio de personas, explotación sexual y/o laboral. Lo relacionan con la venta de órganos, tráfico de drogas, entre otros.
En cuanto al acceso a la información, el 66,5% de los encuestados aseguraron que, gracias a la televisión, internet y redes sociales, conocen de este tema.
Mora destacó que “en 2013 se dio la aprobación de la Ley 9095 contra la trata de personas. Después de la pandemia, muchos se informaban gracias a estas tecnologías.
Los ticos recuerdan ver campañas publicitarias sobre el tema. En relación a esto, Mora destacó que “la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) realizó una campaña mediática en 2016, Corazón Azul.
Campañas de comunicación ligadas a este tema incursionaron para dar a conocer el delito y que las personas lo identifiquen. Estas campañas son las que están en la memoria de las personas”.
Para Jason Hernández Murillo, sociólogo y asistente del estudio, este informe resulta de vital importancia para quienes tienen el poder de la toma de decisiones en el ámbito nacional.
“La población es muy asertiva con el concepto, 78 % conocen estos temas” y detalló que los costarricenses lo conceptualizan como el comercio de personas para explotación sexual, a base engaños, y termina con el tráfico de órganos.
Agregó que perciben a las mujeres y a los menores de edad como la población más vulnerable para ser víctimas de estos delitos.
ATENCIÓN GUBERNAMENTAL
En la encuesta se destacó la preocupación de los ciudadanos por las principales situaciones que incrementan estos delitos y que, a su parecer, requieren la intervención inmediata del Gobierno.
El tráfico y la venta de drogas constituye la principal preocupación de la colectividad, después la delincuencia organizada y la inseguridad.
Los entrevistados piden al Gobierno que atienda con prontitud estas situaciones e indican que a la lista de prioridades se deben sumar los sucesos violentos y el tráfico de armas.
Cientos han sido víctimas del tráfico ilícito de personas o bien del coyotaje. Hay quienes lucran con la necesidad y vulnerabilidad de los migrantes, otros cruzan las fronteras solos, sin documentos, y suelen ser engañados y hasta secuestrados con fines de explotación laboral y/o sexual.
Entre las conclusiones, Mora recalcó lo relevante que es efectuar campañas informativas y de concientización. También “la inversión social en condiciones adecuadas, para que los costarricenses tengan mayor posibilidad de blindarse ante el delito de la trata de personas, porque este delito también se da dentro el país”.
Finalizó con el comentario de que la población tica “está muy expuesta al crimen organizado, a problemáticas como la niñez en la calle, elementos que pueden influir para que las personas sean víctimas de trata de personas”.
CASO TENCHA
La mayor cantidad de víctimas del año pasado fueron costarricenses.
El caso más reciente de trata de personas registrado en Costa Rica, con fines de explotación sexual, fue el detectado durante un operativo en Bar Royal, mejor conocido como Tencha, en Cartago, donde se rescataron a 6 mujeres, de distintas nacionalidades, víctimas de este delito.
PERIODISTA: Deyfid Solorzano
EMAIL: [email protected]
Viernes 01 Septiembre, 2023
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA