La famosa chef Lorena Velázquez, hija de la empresaria de la moda Amanda Moncada, está estos días, y desde hace más de una semana, tratando de llegar al pie de la montaña más grande del mundo.
Ella en su día a día escribe un diario en redes sociales mediante el cual explica qué hacen, pues va acompañada por otros ticos, entre los que destaca el famoso escalador nacional Warner Rojas.
DIARIO EXTRA la contactó brevemente esta semana en horario cambiado y explicó cómo van. Adelantó que primero tuvieron que llegar a Katmandú, la capital de Nepal, que está en un valle rodeado por las montañas del Himalaya. De ahí hay que tomar un avión hasta una ciudad Lukla, a una altitud de 2.860 metros. La ciudad cuenta con el denominado aeropuerto más peligroso del mundo.
“Hola! Vamos varios ticos acompañando a Warner Rojas que sí va a escalar. Nosotros vamos a Campo Base. Un reto durísimo por el frío y por la altura. Yo tengo un par de años de entrenar con Warner y siempre me llamó la atención y le dije que cuando él escalara yo quería ir en la expedición y aquí estamos”, expresó.
Adjuntó que: “Estuvimos dos días, 7 horas cada día, en el aeropuerto de Katmandú tratando de salir hacia Lukla y el clima estaba completamente cerrado, por eso es tan complejo aterrizar allí, se nos abrió una ventana el tercer día y lo logramos”.
La tica adelantó que llegarán a las faldas del macizo y se quedarán ahí, ya que Rojas va escalar la montaña.
A propósito de los costos de llegar a tan bello pero frío como peligroso lugar, adelantó que más o menos 5.500 dólares (3 millones de colones) y dependiendo del costo del boleto para llegar a esta parte del mundo desde Costa Rica.
“APARECIÓ EL EVEREST”
En su último relato por Instagram, señaló: “Bueno, les cuento que aquí el internet es bastante limitado por eso vamos un poquito atrás en relatos, pero el de hoy no puede quedar por fuera. Del grupo que estamos aquí, 5 vikingos aventureros decidimos madrugar literalmente a las 4:30 para subir un cerro llamado Gokyo Ri que alcanza una altura de 5483 m, para mí primera vez así que iba algo asustada, pero dicen por allí quien dijo miedo. Todo estaba calmo foquitos encendidos y bien tapaditos para evitar el frío y comenzó la escalada. A medio camino se empezó a asomar la luz del sol que nos dio uno de los mejores regalos de la naturaleza al iluminarnos todas las montañas resplandecientes que nos rodeaban. A pesar del agotamiento aun siguiendo la regla pole pole, suave, suave y controlando cada paso con buena respiración, la puesta en escena nos dejaba sin aire, realmente indescriptible y de repente allí completamente despejado aparece la madre diosa de la naturaleza, el Everest para motivarnos aún más a continuar.
Después de unas horas de sufrimiento, cansancio y a veces hasta ganas de no continuar, logramos llegar, porque todos somos luchadores y cumplir nuestra meta era lo importante.
Mi corazón latía acelerado y estaba muy abrumada y realmente orgullosa de haber perseverado algo tan complejo. El cielo no tiene límite y lo importante es nunca darse por vencido”.
PERIODISTA: Ariel Chaves González
CRÉDITOS: Fotos: Tomadas de Instagram
EMAIL: [email protected]
Viernes 31 Marzo, 2023
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA