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Opinión

Eliminar la violencia debe ser más que un discurso

Editorial

Ante la conmemoración del Día de la no violencia contra las mujeres y en medio de una crisis que golpea a todos por igual, empezamos a interiorizar que como país nos queda aún mucho por hacer, más si tomamos en cuenta que una de cada 3 mujeres ha sido víctima de este problema social que destruye a diario tantas familias. 

Si bien el mundo no ha vivido un solo día en absoluta paz y la violencia ha existido desde los comienzos de la historia, eso no implica que se repitan patrones odiosos, por el contrario, los miles de años que la especie humana ha vivido deben seguir forjando cambios.

También es importante indicar que los niveles de violencia que hay en la actualidad están rompiendo todo tipo de límites y lo peor es que las mujeres y los niños son los más afectados con las agresiones.

Este 25 de noviembre muchos se tirarán a la calle para ser parte de la marcha donde se enarbolarán las pancartas pidiendo que se elimine la violencia y se corearán consignas de paz en memoria de quienes han muerto a manos de sus esposos, parejas y excompañeros sentimentales, víctimas absolutas del abuso y el irrespeto.

La caminata tenía un fin pedir al gobierno y las instituciones a cargo del tema de género y no violencia políticas públicas enfocadas en la educación y el reforzamiento de valores individuales y familiares. 

Pero como sociedad debemos entender que con estas caminatas no logramos nada, ¿o es que porque tiene años de hacerse entonces ha disminuido la cantidad de mujeres víctimas de violencia?

Lo que necesitamos una mejor educación desde las escuelas, tener iniciativas que como sociedad nos permitan mejorar la calidad de vida de las personas, empoderar a las mujeres para bien, para que entiendan que nadie tiene derecho a hacerles daño así sea que las mantengan o porque sean el amor de sus vidas.  Debemos hacer conciencia, comprender que nadie es dueño de nadie, que vivir sin violencia es un derecho de toda persona sin distinción de su género, orientación sexual, credo religioso, estatus o nivel educativo. 

El problema es que, como lo indicaba la Fiscalía Adjunta de Género, la violencia siempre va a estar presente desde que existe una persona que desea mantener el poder sobre otra, en especial cuando se trata de mujeres. 

Cabe recordar que las conductas de violencia no solo deben ser jalones de cabello, golpes, muchas veces las cosas inician con conductas que algunos creen inocentes hasta que van subiendo de tono. 

Además, cabe tomar en cuenta que muchos lastimosamente han descubierto otro tipo de violencia que muchas veces es igual de dañina que los golpes porque empiezan por dar órdenes a sus parejas como si se tratara de una empleada, en algunos casos las ignoran hasta que estos hombres logran desaparecerlas por completo, pues dejan de ser ellas mismas para quedarle bien a un sujeto. 

Es vital educar a las generaciones más jóvenes en temas como respeto, autoestima, amor sano e integridad. El valor por la vida comienza con estos preceptos.

Todas las personas tienen derecho a vivir en paz, sin miedo, a ser comprendidas y no discriminadas, a la tranquilidad en el hogar y sitio de trabajo. Nadie cuenta con permiso para agredir ni menos a socavar la dignidad humana. La lucha por la no violencia se ha hecho por siempre desde las mujeres, para las mujeres, con las mujeres y por las mujeres, eso es erróneo, también hay que construir nuevas masculinidades.

El ideal de alcanzar derechos básicos para las poblaciones femeninas ha venido a convertirse en un logro incuantificable, pero también en una batalla desmedida entre sexos. Hombres y mujeres se disputan la plata de la casa, los bienes, los hijos y hasta el asiento del bus. 

Si bien la historia ha evidenciado y enfatizado los hechos violentos en contra de la población femenina, desde siempre otros sectores sufren, como las personas con discapacidad, los adultos mayores y los mismos hombres.  Luchemos todos los días por un mundo sin agresión. Todos hagamos en nuestras casas y lugares de trabajo la diferencia. Vivir sin violencia es un derecho.

PERIODISTA: Redacción Diario Extra

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Jueves 24 Noviembre, 2022

HORA: 12:00 AM

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