Existen muertes célebres como los propios personajes víctimas de ellas, pero también algunas vidas acaban de manera inusual, indecorosa o quizá cómica.
El Papa Adriano IV murió atragantado por una mosca, el astrónomo Tycho Brahe, contuvo las ganas de ir al baño durante una cena que le ocasionó graves daños cobrando su vida por no salir a orinar.
El creador de la famosa tragedia griega, Esquilo, falleció cuando una tortuga cayó de las garras de un águila y le golpeó la cabeza.
Sin embargo, dejando de lado lo inusual, se puede catalogar al sexo como una de las actividades más saludables y placenteras que existen; pero implica un esfuerzo físico que, en ocasiones, puede resultar peligroso si se combina con circunstancias poco favorables.
En esta ocasión, hablaremos de tres casos de personajes que fallecieron mientras hacían el amor.
El rey de los hunos Atila estaba en su momento álgido. Según Prisco, historiador tracio del siglo V, acababa de llegar a un acuerdo con el Papa León I y planeaba su mayor conquista: Roma. En el año 453, se casó con su duodécima esposa, una germana de nombre Ilico, no obstante, la luna de miel no duro mucho, ya que apareció muerto por una hemorragia nasal.
El multimillonario estadounidense Nelson Rockefeller, murió el 26 de enero de 1979 a sus 71 años a causa de un infarto. Se dijo que había fallecido en su oficina de Manhattan, pero los medios de comunicación dieron por hecho que había dado su último suspiro en su casa de Maine, mientras hacía el amor con su secretaria Megan Marshak, de 45 años de edad.
Otro de los personajes en fallecer de manera sorpresiva fue Jack Mcconaughey, quien falleció en la cama cuando estaba haciendo el amor con su esposa. Así lo reveló su madre Kay en el libro I Amaze Myself. El relató señala que ante la costumbre de despedirse todos los lunes teniendo sexo con su pareja su marido perdió la consciencia y dejó de responder.
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CRÉDITOS: Foto: Getty Images/iStockphoto
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Lunes 29 Agosto, 2022
HORA: 12:00 PM
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