Soy una mujer casada de 38 años. Nunca en mi vida había sido infiel ni a mi esposo ni a parejas previas. Este fin de año, pasó lo que no tenía que pasar y tuve relaciones con un compañero, después de la fiesta de Navidad del trabajo. Me sentí terrible, y pasé mal todos estos días libres, por dicha nadie se dio cuenta porque pude disimular. No sé si contárselo a mi esposo o si más bien esto empeora las cosas.
- Cuando sucede una infidelidad es recomendable que se busque ayuda médica y psicológica para realizar una valoración integral. Por un lado, para determinar el riesgo de un contagio venéreo, si fuera necesario, asegurarse de que no ha sucedido un embarazo y, sobre todo, para decidir qué procede con la pareja.
Se debe valorar con detenimiento qué es lo más recomendable, si comentar lo sucedido o por el contrario manejarlo con discreción, esta decisión se debe tomar entendiendo que enterar a la pareja provoca un enorme sufrimiento emocional y hasta puede poner en riesgo la relación. En la mayoría de los casos los terapeutas suelen recomendar, por lo menos al inicio, no enterar a la pareja, mientras el paciente asimila de mejor manera la infidelidad cometida.
En infidelidades puntuales, que son aquellas que ocurren casi de forma fortuita en una persona que siempre ha mantenido la fidelidad, es fundamental que se asuma un proceso terapéutico, usualmente breve, que permita identificar las razones de este desliz, así como determinar si puede volver a suceder, con el fin de evitarlo.
De igual manera si se decide comentarlo con la pareja es aconsejable que ambos, juntos, busquen ayuda profesional para que puedan reponerse del cisma emocional que representa la infidelidad.
PERIODISTA:
CRÉDITOS: Dr. Mauro Fernández
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Miércoles 19 Enero, 2022
HORA: 12:00 AM
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