Una joven fue víctima de una serie de torturas por ocho horas, al menos, entre el 16 y 17 de diciembre, luego de que la engañaran con una invitación a comer tamales y llegara a una vivienda en Salitrillos de Aserrí.
El caso se investiga por los presuntos delitos de lesiones gravísimas y secuestro, bajo la causa número 21-001461-0053-PE, en perjuicio de una joven de apellidos Carrillo Gallo de 25 años.
Según el documento que respalda el allanamiento, la Sección de Inspecciones Oculares y Recolección de Indicios recibió un informe sobre el ingreso de una mujer al área de emergencias del Hospital San Juan de Dios, la cual indicaba que, en apariencia, fue víctima de un intento de robo.
Al llegar al nosocomio ubicaron a la joven, quien tenía amputación de los últimos dos dedos de la mano derecha, golpes en el rostro y en otras partes del cuerpo.
En un inicio, la víctima mencionó que sufrió un intento de asalto, pero luego dijo que no deseaba interponer la denuncia al respecto.
DROGAS
De acuerdo con el documento del cual DIARIO EXTRA tiene copia, la pareja de la joven no cuenta con un trabajo formal, añade que hace aproximadamente dos meses él se involucró con algunas personas que venden droga y con quienes han venido teniendo problemas.
Inclusive, indica que es consumidor y le dieron aproximadamente una libra de marihuana para que la vendiera, pero en apariencia el hombre no había pagado y debía, al menos, cien mil colones.
MASAJE
Ante esta deuda, la mujer de apellido Marín Pandolfi contactó a la víctima buscando a su pareja, al no ubicarlo, le pidió a la joven que llegara a su casa para que se comiera unos tamales y le hiciera un masaje.
La víctima ya había estado en la vivienda de Marín Pandolfi en varias ocasiones, pues le había hecho trabajos de limpieza y masajes.
De inmediato dejó a su hijo de cinco años con su mamá y se llevó con ella al pequeño de tres años, pensando en que si la veían con él no le harían daño.
A la joven le indicaron que le pagarían por hacerle un masaje a Marín, por lo que ella tomó un Uber y se desplazó al lugar en Salitrillos.
Al llegar, la recibió un sujeto alias “Rasta”, quien le tapó los ojos, la ingresó a la vivienda, la hicieron subir las gradas y la llevaron a un cuarto, mientras que al niño de tres años lo llevaron a otro cuarto bajo la custodia de otro sujeto.
Una vez a merced de sus agresores, dos mujeres la golpearon en el rostro y la comenzaron a torturar diciéndole “que andaba de prestada”.
“Ella trataba de meter las manos para cubrirse, pero más duro la golpeaban, le taparon la boca con telas amenazándola con que si gritaba la apuñalarían, continuaron golpeándola, se le paraban sobre el abdomen, le pegaban muy fuerte en el pecho, Marín la golpeaba, le decían que picarían al niño y le cortarían los dedos, así que ella suplicó que por favor no le hicieran nada al pequeño, le ponían una bolsa plástica transparente de jabón color celeste sin marca visible en la cabeza tratando de asfixiarla, estando en el suelo la obligaron a poner las manos en una pequeña mesa”, cita el documento.
Instantes después otro sujeto, quien aparentemente estuvo en prisión, le cortó los dos dedos, mientras que Marín le cortó la cabeza con uno de los cuchillos, otro sujeto le apuntó en la cabeza con un arma 9 mm.
PERIODISTA: Sharon Cascante Lizano
CRÉDITOS: Fotos: OIJ
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Martes 21 Diciembre, 2021
HORA: 12:00 AM
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