Diario Extra - 'Cangreja': de empresario hotelero a político narco

Mario Emilio Rojas Mendiola, alias “Cangreja”, líder de la banda narcotraficante detenido esta semana en la operación bautizada por la policía como Amandita, tiene un amplio historial delictivo en poco tiempo, además es un reconocido personaje en la Zona Sur por su participación en eventos comunales, política y negocios de hotelería.
Su carrera criminal inició en noviembre del 2019, al menos para esa fecha fue la primera vez que lo detuvieron por tráfico internacional de drogas.
Una vez ante las autoridades se le impuso prisión preventiva, la que finalizó el 27 de agosto del 2021, día en que el Juzgado Penal de Heredia tomó la decisión de colocarle monitoreo electrónico.
Este beneficio carcelario vencía el 18 de febrero del 2022, lo cual no fue posible cumplir, pues lo capturaron por segunda vez durante 34 allanamientos que realizó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), uno de ellos en su casa de Sierpe, Osa.
Esta segunda captura se realizó también por estar involucrado y figurar como el líder de la banda que se dedica a la distribución y almacenamiento de estupefacientes.
Se presume que el perfil del sujeto las autoridades lo tienen muy claro y su aprehensión les llevó tiempo porque al parecer es escurridizo.

INVOLUCRADO EN POLÍTICA

De acuerdo con la página del Registro Nacional, Cangreja se postuló como candidato a regidor por el distrito de Bahía Drake en Osa, Puntarenas, en las elecciones municipales del 2016.
DIARIO EXTRA descubrió en un documento de la Secretaría del Concejo Municipal de Osa el hombre era un líder comunal y figuraba como representante de la Asociación de Desarrollo Integral de Drake.
Huanelge Gutiérrez, psicólogo criminalista, explicó que a los narcotraficantes les gusta involucrarse en la política porque quieren estar ligados al poder, lo cual significa que una vez logran establecerse en puestos de altos mandos les es más fácil controlar lo que sucede a su alrededor.
“Tener contactos, amistades, que les sirven para muchas cosas como hacer negocios, inclusive para tener esas fuentes de información policial, más que todo en lugares lejanos, donde hay jefes de policía centralizada”, expresó.
También cuenta que el acceder a puestos como el de regidor, donde se tiene un grado de poder o influencia municipal, les sirve para estar en contacto con el pueblo, así como empresarios, desarrolladores o quienes se dedican a la venta de propiedades.

NEGOCIOS

De acuerdo con el Registro de la Propiedad, este líder criminal es dueño de varios comercios como hoteles, minisúper y supermercados que creó desde 2005.
Las propiedades fueron utilizadas como mampara para ocultar sus movimientos reales en el narcotráfico y para no levantar sospechas mantuvo los negocios al día con los pagos municipales.
El psicólogo criminalista contó que la Zona Sur está compuesta por comunidades alejadas, donde el patrullaje marítimo y terrestre se les dificulta a las autoridades.
“El país no tiene la capacidad a nivel de equipamiento y personal para tener un control fuerte sobre estas zonas marítimas, es por eso que se firman los famosos convenios de patrullaje en conjunto con los Estados Unidos”, indicó.
Relató que Drake, Osa y Sierpe son lugares difíciles, donde llegan lanchas cargadas con droga desde Panamá y Colombia.
“Los niveles de pobreza son importantes porque el empleo es escaso. Otro elemento fundamental es que hay inversión extranjera y las personas que pueden llegar compran propiedades, establecen pequeños negocios, hoteles y todo eso sirve más si se debe a un tema político”, expuso.

PERFIL

“Recordemos que la gente que se mete de lleno con temas de narcotráfico, por lo menos en lo que es la venta, el transporte, el almacenamiento, el cobro de cuentas, es gente que anda en edades muy jóvenes entre 20-40 años”, señaló el especialista.
Asimismo, detalló que el nivel educativo que poseen quienes se dedican a este negocio no es muy alto, pues algunos apenas alcanzaron terminar el colegio.
Generalmente son personas que acceden a dinero fácil y conforme pasa el tiempo se establecen como empresarios.
“Conocen la zona, se manejan muy bien esos territorios e infringen algún grado de temor y manipulación en ciertas personas”, exteriorizó.

ZONAS VULNERABLES

El criminólogo Gerardo Castaing dijo que es imposible controlar el paso de estupefacientes en Costa Rica.
Tras una investigación que realizó el criminólogo vía aérea, observó cómo la zona se ve como un laberinto. “Es casi imposible para la policía controlar eso y hay un flujo constante de ingreso de cocaína”, manifestó.
“El país no invierte en seguridad, entonces el personal que hay es insuficiente, la logística no es la adecuada, la capacitación tampoco es la adecuada”, agregó el investigador. Por esta razón las zonas son vulnerables, finalizó.