Las estupideces ante el Covid-19

Osvaldo Corrales Jiménez

Es necesario poner de relieve una serie de aspectos en torno al manejo de parte de las autoridades del Gobierno ante la situación por Covid-19. Y es que desde que llegó la pandemia a nuestro país, se generó en los primeros días un ambiente de pánico, incluso propiciado por los mismos personeros del Ministerio de Salud y de parte de otras instancias públicas, además se empezaron a implementar medidas de distanciamiento social, cierre temporal de negocios y actividades comerciales. Es más, empezó a circular la idea de mantener una tal “burbuja social” que nunca existió ni existirá como tal, pues cuando las personas deben salir de sus hogares esa burbuja se rompe y de una u otra manera muchas personas se contagian con el Covid-19.
Otra cosa, con la llegada masiva de vacunas, al principio se establecieron grupos prioritarios de vacunación, luego hubo varias protestas de ciertos sectores públicos y privados contra el Gobierno por el mal manejo de los procesos de selección de personas, para recibir las dosis. Y pese a que gran cantidad de personas ya han sido vacunadas, los contagios no han disminuido como se esperaba. Por otra parte, se ha anunciado que las autoridades del Gobierno ahora pretenden obligar a todos los ciudadanos a la vacunación, y a portar un código QR (marcados digitalmente como si fuésemos un tipo de ganado) a partir de diciembre de este 2021. Pero eso no es funcional, pues incluso desde meses anteriores se han vacunado a muchas personas que antes habían tenido el contagio (dictaminado por pruebas de laboratorio y por nexo) lo cual implica que ya habrían obtenido su inmunidad natural por lo cual no era prioritaria su vacunación, en cambio si se hubieran aplicado las dosis solo a personas nunca contagiadas quizás se hubiera controlado mejor la situación.
Otra cosa, hay personas que tienen condiciones especiales (por ejemplo, muy susceptibles) que en cambio pueden resultar afectadas con la aplicación de esas vacunas, que aún están en un periodo experimental. En otras palabras, se evidencia la mediocridad de los mismos especialistas en virología e infectología por no recomendar al Ministro de Salud cuál debería ser la aplicación lógica y racional de la vacunación. Es más, ante esa obligatoriedad sin sentido técnico, cabe un recurso de amparo contra el Ministerio de Salud, y así deponer esa medida autoritaria.
Pasando o retomando el asunto de otras medidas, se tiene que las restricciones vehiculares han sido todo un juguete contra las personas que necesitan viajar en sus carros. Entonces, cada cierto tiempo los altos jerarcas del Gobierno vinculados al tema de la pandemia dictan una serie de lineamientos y luego los cambian, e incluso fomentan el uso de los autobuses que en realidad son fuente de contagio más evidente, sino basta subir a algunos buses y ver lo sucios que están en sus paredes, ventanas y pisos lo cual implica que no se cumplen medidas de higiene.
Y observando, por ejemplo, bares, también se puede advertir que, pese a los aforos, cuando la gente ya está muy tomada de licor se olvidan del distanciamiento físico y se acercan unos a otros lo cual fomenta un ambiente para más contagios. En resumen, se ve que estamos “manejados” por un grupo de ineptos del Gobierno, que no tienen verdadera inteligencia, ni lógica ni análisis interdisciplinario para aplicar medidas adecuadas.

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Sábado 23 Octubre, 2021

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Osvaldo Corrales Jiménez